«Nos vamos a quedar 200 trabajadores en la calle y nadie hace nada por remediarlo»
Los trabajadores de CMP Automotive Sealing y Handling retoman la huelga tras no llegar a un acuerdo con el grupo Volkswagen para recibir un incentivo a la producción hasta agosto, cuando cierren las plantas en Logroño
«Hartos» de esperar un acuerdo que no llega y «abandonados» por parte de la empresa y de las instituciones, los trabajadores de las ... plantas de CMP Automotive Sealing y Handling en el polígono Cantabria han retomado este lunes una huelga que habían convocado a primeros de junio pero que la habían dejado en suspenso durante todo este tiempo a la espera de que las negociaciones con los administradores concursales y con el grupo Volkswagen –Seat es el principal cliente de las fábricas logroñesas– llegasen a buen término. No ha sido así. «Y la gente ha decidido plantarse», han puntualizado representantes sindicales. A las seis de la mañana comenzaban los paros en Sealing y a las dos de la tarde en Handling, el centro especial de empleo donde el 90% de los empleados tiene algún tipo de discapacidad.
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«Nos enfrentamos a un futuro complicado»
Esta huelga será indefinida «hasta que se firme el acuerdo para recibir un incentivo. Llevamos semanas recibiendo largas y diciéndonos que esperemos, pero ya vale», ha relatado a Diario LA RIOJA, visiblemente molesto, Jesús Martín, trabajador de CMP Sealing y miembro del comité. Las negociaciones mantenidas en las últimas semanas por los sindicatos USO, CC OO y UGT con los administradores concursales y con Seat buscaban, precisamente, que los trabajadores recibieran estos tres últimos meses, antes de que el 31 de agosto se queden en la calle, un dinero 'extra' para estimular la fabricación de piezas (juntas de estanqueidad para las puertas de los coches).
Pero cuando el acuerdo parecía inminente, todo se ha ido al traste. «Aquí nadie quiere comprometerse a nada, los únicos que hemos cumplido hemos sido los trabajadores y los sindicatos. Pero la realidad es que somos más de 200 personas, de Logroño, con sus familias que nos vamos a quedar todos en la calle sin que nadie haga nada por remediarlo», ha reprochado Martín. Y los afectados tienen perfiles muy diferentes, desde gente joven que lleva poco más de un año en la empresa hasta trabajadores próximos a la jubilación y con más de dos décadas de trayectoria. «Aquí todos vamos a ir al mismo lugar, primero a la calle y después a cobrar del Fondo de Garantía Salarial (Fogasa), a ver cuándo podemos recibir el dinero de las indemnizaciones y cuánto nos llega», se han quejado algunos operarios que preferían omitir sus nombres.
Cierre el 31 de agosto
Este inminente cierre de la actividad a partir del 31 de agosto o de las primeros días de septiembre «ya se veía venir», han añadido, porque hace unos meses «se decidió aceptar un proyecto para fabricar piezas para Audi que desde el primer momento se vio que no era rentable. Y el grupo Volkswagen empezó a perder la credibilidad en la dirección de CMP en Logroño». En su crítica a los actuales responsables del grupo en La Rioja, han censurado que «en los últimos tiempos nos han hablado de inversiones que luego nunca se concretaban» y todo esto ha «colmado la paciencia» de la multinacional alemana.
Ni los administradores concursales ni CMP Automotive han trasladado a los trabajadores propuestas de recolocación. «Se trata de un concurso de acreedores por causas económicas y si lo presentan es para desentenderse de todo, también del personal», se temen los afectados, que se preguntan «cómo es posible» que en la planta de Sealing «la facturación anual ascienda a 14 millones de euros y se hayan declarado unas pérdidas de 28 millones según los últimos datos».
«El Gobierno ha dicho que nos acompaña. Pero acompañarnos adónde, si nos sentimos abandonados por todos»
Jesús Martín
Trabajador de CMP Automotive Sealing y miembro del comité
Portavoces de USO, CC OO y UGT reclaman tanto a la administración como a Seat que sean «ágiles» a la hora de tomar las decisiones. «Si están dispuestos a pagar ese incentivo, teniendo en cuenta que los trabajadores se van a la calle en menos de dos meses, que lo firmen. Y si no, pues que lo digan también pero entonces que decidan cesar ya la actividad», denuncian
Porque el desencanto en los trabajadores es «total». En el centro especial de empleo «nos dicen los compañeros que los proveedores ya no llevan material; por ejemplo, la semana pasada faltaba jabón de manos», detalla Elena Berruezo. Estas situaciones «están generando un daño psicológico tremendo, porque el final se acerca y el recuerdo que va a quedar para todo los trabajadores es malo. Solo hay exigencia a cambio de nada».
A la espera de noticias del Gobierno y del anuncio de Capellán
En las últimas semanas el Gobierno de La Rioja ha reiterado su labor de acompañamiento a los trabajadores de las plantas de CMP Automotive. «Pero dónde nos va a acompañar, si nos vamos a quedar en la calle. Yo personalmente siento que todos nos han abandonado: la empresa, los administradores, el Gobierno...», señala Jesús Martín, trabajador y miembro del comité. Los sindicatos exigen al Ejecutivo de Capellán que tome medidas «para intentar preservar los puestos de trabajo» en otras plantas de CMP. Y respecto al anuncio del presidente de que su Gobierno estaba en contacto con el personal del centro especial de empleo para «buscar soluciones», la parte social pide «movimientos de manera urgente».
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