Los daños en el campo riojano alcanzan ya las 37.000 hectáreas, en un año récord de siniestralidad
Las indemnizaciones suman 32 millones y Agroseguro avanzará en agosto el pago de dos por la tormenta que destrozó las viñas en Moncalvillo en junio
«Estamos ante el año del pedrisco». La frase la pronunció ayer Sergio de Andrés, director general de Agroseguro, en una visita a unos viñedos de Medrano, una de las localidades incluidas en la 'zona cero' de la tormenta que en la tarde del pasado 11 de junio rompió el cielo sobre las faldas de Moncalvillo. Aquel episodio meteorológico se ha convertido en uno de tantos sobre todo en los tres últimos meses, desde que en mayo comenzasen los fenómenos adversos.
Y desde entonces ha habido una sucesión de granizadas, vendavales, danas o lluvias torrenciales que por el momento han generado daños en más de 37.000 hectáreas de cultivo en La Rioja, principalmente de viñedo pero también de cereal, frutales y hortalizas. Se trata de una cifra récord de siniestralidad en la región, reconoció De Andrés, y que también extendió a España. «Llevamos unas 700.000 hectáreas en el primer semestre» y no descarta que con casi medio año por delante se llegue al millón, teniendo en cuenta que faltan periodos especialmente peligrosos como pueden ser las tormentas de agosto o las granizadas. «Es el año del pedrisco», reiteró, y el de más desastres «en los 45 años de historia de Agroseguro».
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Los partes por siniestros ya declarados elevan las indemnizaciones en La Rioja hasta los 32 millones de euros, una cifra que en seis meses y medio ya supera al de todo el año 2023, que con 31 millones –por daños en 27.000 hectáreas– era el más negativo para el campo. Solo en este mes de julio «ya tenemos siniestros por valor entre seis y siete millones», puntualizó el responsable de Agroseguro.
En algunos casos, ni siquiera ha habido tiempo para recuperar los cultivos de la tormenta anterior. «Queremos estar muy cerca de los agricultores», dijo Sergio de Andrés, que les instó a «no dejar los tratamientos porque la vida sigue y queremos que sigan teniendo uvas para elaborar vinos». Y en este sentido anunció que ya se ha hecho la tasación definitiva del episodio adverso del 11 de junio «y vamos a adelantar a primeros de agosto el pago de las indemnizaciones por valor de dos millones de euros para los viñedos con daños por encima del 80%» –antes el dinero se abonaba entre septiembre y octubre, ya para la vendimia–.
Más aportación en 2026
La consejera de Agricultura, Noemí Manzanos, agradeció el trabajo,«la empatía y la rapidez de Agroseguro y de sus medios técnicos y humanos» a la hora de evaluar los daños en el campo riojano. «Es importante que nuestros agricultores se sientan acompañados» y por ello recordó que el Gobierno regional destina al año 4,5 millones de euros para ayudar a la contratación de las pólizas. «Buscamos cómo se puede mejorar la cobertura de esas líneas de seguro», añadió, al tiempo que también anunció su intención de aumentar esa partida económica del Ejecutivo de cara ya a 2026 para «ayudar con la financiación».
La Rioja es, según De Andrés, una de las comunidades «con una mayor implantación del seguro agrario» y en función de su población «está entre las que más aporta a Agroseguro». De hecho, el recibo de la prima que pagan los agricultores y ganaderos –junto a las aportaciones de las administraciones públicas– se eleva a 25 millones de euros. «Ellos (los profesionales agrarios) son los primeros que perciben los riesgos climáticos», destacó.
El 70% del viñedo, el 74% de las explotaciones de cereal y el 75% de los cultivos frutales tienen esa cobertura con Agroseguro, según datos facilitados por la consejera Manzanos. Se trata de alrededor de 30.000 hectáreas de viñedo con un capital de 144 millones de euros, de más de 42.000 hectáreas de cereal con un capital cubierto de 45 millones y de más de 2.200 hectáreas de árboles frutales con 31 millones de capital asegurado.
«Tener cubierto entre el 70% y el 75% de las explotaciones está muy bien pero aún hay casi otro 30% de agricultores que no tienen ningún tipo de póliza y en años especialmente negativos como el actual se exponen al riesgo de perderlo todo», recordó la consejera de Agricultura. Porque los fenómenos meteorológicos adversos seguirán. «Parece que para este fin de semana viene otra dana», remató De Andrés.
Reivindicación para que el seguro cubralas pérdidas por mildiu
Agroseguro cubre los daños por fenómenos meteorológicos adversos pero ahí no se incluye el mildiu. Ni siquiera este año, cuando las abundantes lluvias combinadas con los calores extremos han creado el caldo de cultivo idóneo para que el hongo aparezca en los viñedos, aunque los viticultores se esfuercen en controlarlos. Sin embargo, en el sur de España el mildiu sí se incluye en las pólizas. «Por eso en las conferencias sectoriales las comunidades del norte, como Galicia, Castilla y León, La Rioja, Cataluña, Navarra o País Vasco, reclamamos que las coberturas de seguros» también lleguen al mildiu, recordó Noemí Manzanos.
La consejera quiso destacar la «profesionalidad» de los agricultores en un año «especialmente difícil porque estamos teniendo más gastos que nunca –en tratamientos para evitar el mildiu– cuando menos kilos de uva hay en las viñas». Y si las inclemencias meteorológicas no permiten hacer las prácticas agronómicas, «no se puede atribuir la responsabilidad al viticultor. Porque aquí nadie está escatimando ningún esfuerzo».
