Festival Actual
Larga nostalgia como regalo de ReyesTahúres Zurdos cierra la programación del festival Actual 2024 llenando la Sala Fundición con un entrañable concierto de dos horas anclado en el pasado
«Igual que hace 30 años. El mismo corte de pelo. Bueno, antes lo tenía más largo», comentó un espectador al arrancar el concierto de ... la banda de Aurora Beltrán. Actual 2024 ha cerrado su programación con una concesión al pasado como Tahúres Zurdos, que tocaron en 1992 junto a Los Rodríguez, y tal vez lo más sorprendente sea que con todas las veces que después ha venido a La Rioja Aurora Beltrán y la banda a tocar, sin excesiva repercusión, ahora por arte magia llene la Sala Fundición, aunque sea con cerca de 200 espectadores. Actual es así, como una intensa lluvia que todo lo arrastra.
Arrancó el concierto con la canción 'Miss Hyde' y continuó a ritmo de rockabilly con 'Lujuria', y sonaban bien. «Lo que vais a ver es algo de verdad. Desafinaremos, yo tengo catarro y nos equivocaremos», confesó Aurora Beltrán, y fue una sincera y valiosa declaración de intenciones frente al artificio y la apariencia que parece imperar en el panorama artístico actual.
La música de Tahúres Zurdos no es el «rocanrol animal» que cantan en 'Él lo predijo' pero es un pop-rock sin complejos, que siempre ha estado en una honesta segunda fila y que se confiesa abiertamente imperfecto. El concierto fue correcto y ofrecieron una sensación de nostalgia, más aún para los que venían de la proyección de 'La estrella azul', película sobre Mauricio Aznar (Más Birras).
Sonó a 'power pop' por momentos y por momentos a 'country'. Con 'Azul' y 'Nieve negra', canciones más lentas, el público ya cantó los estribillos. Mediado el concierto interpretaron varios temas en formato acústico, 'Afiladas palabras', 'Muerte ven', celebrada por el público, y 'Horas'. Fue un momento de complicidad entre Aurora Beltrán y Arantxa Ojeta (La Prima Janis), quien acompañó a la banda navarra durante todo el concierto a la guitarra y los coros. Después, ya con la banda al completo sonó 'Las botas', emprendiendo la recta final del repertorio, que finalizó con 'Planeta Ruido'.
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En barra se pedía cerveza sin alcohol o con limón, botellines de agua y Coca-Cola Zero, esa era la generación. Hubo hasta un diputado regional. Y hay que reconocerle a Aurora Beltrán haberse abierto un hueco con un estilo propio, si bien claramente deudor de Patti Smith y Janis Joplin, en una Navarra en la que hace décadas explotaba Barricada, pero bien es cierto que la música de Tahúres Zurdos se ha quedado anclada en esa época. Tiene letras comprometidas y críticas, pero que ahora resultan ingenuas, casi de 'boy scout'. «Se han mantenido siempre fieles a este estilo», destacó un fan. Y es verdad, para bien y para mal. La realidad también es que las dos horas de concierto resultaron, al principio, entrañables, y al final, largas. «Este sí que es un regalo de Reyes, sobre todo para nosotros», había reconocido Aurora Beltrán al comienzo.
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