Las obras de los accesos de San José van con retraso y ya hay dudas de ejecutar los fondos en plazo
El Ayuntamiento ha ampliado el periodo inicial agotado por Ocisa, lo que ha provocado un parón en las puertas de entrada y salida al barrio ocasionando las quejas de los vecinos
Avanzaron y avanzaban, conforme a lo previsto según se dijo en la última visita, hasta que la semana pasada dejaron de hacerlo desatando todo tipo ... de dimes y diretes entre el vecindario. Sea como fuere, las obras se han retomado varios días después, y desde el Ayuntamiento de Logroño, a requerimiento de Diario LA RIOJA, se ha explicado lo sucedido en torno al proyecto de accesos a la 'supermanzana' de San José: se confirma que va con retraso y que el reto de cumplir con el plazo de ejecución a 31 de diciembre, dado que son fondos europeos que hay que justificar, se ha convertido en una auténtica contrarreloj.
Así, y según han justificado a este periódico desde el Consistorio capitalino, la no presencia de obreros en la confluencia de avenida de la Paz con Beatos Mena y Navarrete, una de las diez puertas de entrada y de salida contempladas para la creación del 'área pacificada', se ha debido a la necesidad de tramitar una ampliación del plazo de obras. Ello tras haber expirado en noviembre los seis meses oficiales, y todo después de demorarse más de un año el inicio de obras tras el cambio en la Alcaldía.
La adjudicataria, a la espera desde abril de 2023, inició los trabajos en mayo de 2024 y ha pedido «prórroga» para acabar
De hecho, no fue hasta mayo de este año cuando, 13 meses después de su adjudicación, la Administración local comenzaba la proyectada como primera fase prevista para el citado barrio, entre las calles Madre de Dios, Luis de Ulloa, avenida de la Paz y San Millán.
Un proyecto heredado con financiación de la UE (del mismo paquete de los carriles bici que mantienen en el aire hasta 6,5 millones) asumido sin 'peros' por Conrado Escobar, tal y como lo había tramitado Pablo Hermoso de Mendoza (podría decirse que de los pocos, de hecho), que, no obstante, se dilató pese a estar anunciado para julio del año pasado.
El propósito, antes y después, era y es el de procurar la implantación dentro del barrio de San José (como en el de Madre de Dios) de una zona de tráfico calmado siguiendo el modelo de las 'supermanzanas' (áreas en cuyo interior se reduce al mínimo el tráfico, que circula por las vías de fuera, dando la máxima preferencia a los peatones).
La actuación, adjudicada en abril de 2023 a Ocisa por importe de 706.741 euros, cuenta con dinero de Bruselas (hasta 446.280,30 euros) a través de los fondos Next Generation, y disponía de un plazo de ejecución de seis meses. Medio año que, sin embargo, no empezó a contar hasta mayo de 2024, por lo que expiraba este noviembre. Ello llevó a la adjudicataria a solicitar una prórroga, lo que ha supuesto la tramitación de una ampliación de plazo, traducida en esa semana larga de parón.
Desde el gobierno local se confía en que al menos la parte subvencionable pueda estar lista al 100% para el 31 de diciembre
Y eso pese a que a principios de octubre se dio cuenta en una visita del alcalde de que la creación del 'área pacificada' estaba avanzando según lo previsto, reiterando que el objetivo con el que se trabajaba era «que las obras pudiesen estar concluidas en su totalidad antes de que acabe el año» (a fin de justificar los fondos europeos con que se cuenta).
Una afirmación del propio Escobar que es justo la que ahora, con seis puertas acabadas, dos más iniciadas y otras dos aún pendientes, está en duda siendo como es diciembre y con las navidades (y antes un puente) a la vuelta de la esquina. Desde el equipo de gobierno se confía en que al menos toda la parte subvencionable, eso sí, pueda estar lista a 31 de diciembre, fecha límite.
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