ARAD alerta del alza de las atenciones a mujeres, sobre todo por el alcohol

La entidad realizó a lo largo del pasado año un total de 1.079 atenciones, de las que el 74% eran hombres y el 26% mujeres, tras un incremento de la tasa femenina de un 4% en los últimos doce meses, según señalaron, durante la presentación de la memoria 2022, Montserrat Domínguez, presidenta de ARAD; y María Milagro, vicepresidenta y psicóloga del centro.

Domínguez, que situó el perfil más habitual en personas de entre 34 y 44 años y con una media de consumo de 11 años, detalló que la sustancia principal de adicción, tanto en hombres (33% de los atendidos) como en mujeres (58%), es el alcohol, «un consumo que va en aumento», advirtió la presidenta, quien destacó que en el caso del cannabis es del 18% en ellos y el 10% en ellas; en el de los estimulantes, del 17% y 10%, respectivamente; en la cocaína, del 15 y 10%; en el de los opiáceos, del 11 y 8%; y en el de las adicciones sin sustancia, del 6% en los hombres y 8% en las mujeres.

«Tras la pandemia han aumentado las demandas de ayuda, pero esos consumos ya existían, estaban escondidos, lo mismo que los problemas de salud mental», resaltó Montserrat Domínguez, quien admitió que «las mujeres antes no venían, antes apenas representaban el 19% de nuestros usuarios, porque todavía hay un estigma social ante las adicciones que en el caso de ellas era una barrera que retrasaba los tratamientos».

«Las mujeres consumen en soledad, a escondidas, porque aún hay mucho estigma social, y para cuando nos llegan, en el 90% de los casos derivadas desde el Servicio Riojano de Salud, sufren ya un problema grave y un deterioro físico y neurológico importante», aseveró, por su parte, la psicóloga de ARAD, María Milagro.

Además de explicar que «los recursos de salud mental están desbordados y eso se nota en las derivaciones», la especialista aseguró que «las ideas de suicidio están muy presentes y también la preocupación en los familiares».

En este sentido, la experta en Psicología añadió que «el tipo de perfil que nos llega ya no es solo por adicciones graves, sino también por trastornos mentales importantes e ingestas compulsivas con finalidades autolesivas de daño personal».

La también vicepresidenta de ARAD admitió que en el caso de los adolescentes y los más jóvenes «todas las encuestas indican que el consumo de alcohol es importante, especialmente en las mujeres, y también el de los estimulantes e hipnosedantes», sin olvidar los repuntes en la atención a familias por problemas de conducta por el abuso de los videojuegos y nuevas tecnologías, un perfil en el que sitúo la horquilla de esos menores entre los 8 y los 14 años, aunque luego también hay, evidentemente de 16 y 17 años».