Zabala se estrena en Primera con buen juego y derrota

A las ocho y media de la mañana le sonó el teléfono a Javier Zabala. Tenía que hacer la bolsa que había deshecho en la madrugada del sábado e irse a Vitoria. La cita era en el Ogueta, como suplente de Jokin Altuna, que había suspendido horas antes. Allí se encontraría con Iñigo Bikuña como compañero, que tomaba el testigo de Aranguren. Pareja improvisada para medirse a Elordi y Zabaleta, aspirantes a las semifinales.

Llegaron ambos y perdieron. Era lo lógico, perder. La cuestión, más allá de la derrota, es saber en qué categoría juega mejor el riojano en Primera o en Segunda. No dudó en afirmar él que se siente mucho más a gusto con el material de Primera. Su imagen sobre el frontón avala la afirmación. Más intento, más decisivo con el remate y con mayor salida de la esférica. Ahora bien, él juega y la empresa decide.

Zabala y Bikuña mantuvieron la igualdad hasta el sexto tanto. Abrió el marcador el logroñés con una dejada, pero respondieron sus rivales con su primera tacada, de cuatro, entre ellos dos saques. El saque fue letal para Bikuña, que encajó seis, pero además tanto Elordi como Zabaleta le exigieron continuamente conscientes de que era menos peligroso que el riojano.

Empataron a cuatro, con un gancho de Zabala y dos errores rivales, y se pusieron por delante, 4-5 y 5-6, pero un falló de Bikuña propició las últimas tablas. El donostiarra pasó por su peor momento. Encajó tres saques más y cometió cuatro errores, lo que llevó el electrónico hasta el 14-7, primero, y el 15-7, después de que Zabala mandase la pelota a la contracancha.

Esa diferencia de ocho tantos parecía, y era, insalvable. Volteó el partido. Zabaleta erró con la derecha, Elordi mandó la pelota abajo, primero, y a la contracancha, después, y Zabala ejecutó uno de sus ganchos, que alentó la grada, aliada con los rezagados (15-11). Poco duró la alegría. Bikuña no llegó al frontis y Zabala mandó la pelota a la chapa superior. Punto y final. Elordi reapareció con un gancho, firmó su sexto saque y Zabaleta desbordó a Bikuña con su pelotazo. El 20-11 era insalvable. Bikuña volvió a fallar con la derecha, exigido una vez más, y la pareja azul se quedó sin red de seguridad. Un error más, o un acierto del rival, y adiós. Llegó, en la derecha de Bikuña.