El Varea, a noventa minutos de la gloria

Las sensaciones que dejó el equipo riojano la semana pasada en el Ángel Aguado permiten mantener vivas las esperanzas del ascenso. Tuvo grandes ocasiones el Varea de conseguir un buen resultado de cara a la vuelta, como la sucesión de remates de Edu Ubis dentro del área o el palo de Tamayo instantes antes de que el Rayo abriera la lata, pero la puntería innata de Etienne Eto'o marcó la diferencia.

Y es que fue el hijo del mítico delantero camerunés, fue el encargado de anotar los dos goles de la victoria del filial capitalino (1-2) convirtiéndose en la peor pesadilla del equipo del barrio logroñés para esta final. Así lo confirma su entrenador, Adrián Gallego. «Es el jugador más determinante que tiene el Rayo B, es el más goleador y al que más hay que tener en cuenta». El delantero rayista ha anotado esta temporada 30 goles, nada más y nada menos.

Pese a que las cifras y la lógica ponen al filial del Rayo Vallecano como favorito de la eliminatoria, el Varea asegura viajar a Madrid con hambre de dar la sorpresa. «Tenemos muchas ganas de poder dar una buena imagen, como ya dimos en Varea, poder competir y luego, si tenemos la fortuna que no tuvimos en la ida a la hora de meter gol, poder darle la vuelta al resultado y ascender», explica el preparador riojano.

«Sí que es cierto que a principio de temporada no piensas en ello y se está haciendo largo, sobre todo por el calor; pero llegando a estas alturas, si lo conseguimos, bienvenido sea», añade Gallego. El equipo del barrio logroñés confía en sus posibilidades y sabes cuáles son su cartas aunque, en el caso de no conseguir doblegar a un rival de la talla del Rayo B, «nada ni nadie nos quitará el orgullo que sentimos por la temporada que hemos hecho y a descansar, que ya hay ganas», comenta el entrenador entre risas.

Es un día importante para el club, el más importante de los últimos años y nadie quiere perdérselo. Es por ello que Gallego ha convocado a todos sus chicos, los 20, incluso a Txomin, que tuvo que viajar junto a su silla de ruedas después de sufrir una grave lesión en su rodilla en el partido de ida. También estarán acompañados por un centenar de aficionados que buscarán aupar a su equipo si el sueño se cumple y arropar a su vestuario si el ascenso no se consigue.