El Promete pisa fuerte en Bembibre

Fue esa intensidad en defensa la que le dio alas al equipo riojano tras el descanso. De hecho, las locales solo marcaron siete puntos después de mantener un pulso con mucho ritmo durante toda la primera mitad de encuentro. Un primer cuarto donde mandó la equidad, aunque fue el equipo leonés el que cogió mejor sintonía de inicio, si bien las de Aneas nunca le perdieron el pulso al partido.

Estaba todo muy equilibrado, pero era el equipo local el que mandaba en el electrónico. Hasta que a un minuto del final de ese cuarto, Paula Estebas, que acababa de salir a pista, clavó un triple para poner la igualdad en el marcador. Una paridad que se mantendría hasta el final de aquel primer cuarto (24-24) frente a un Bembibre que encontraba en Batouly Camara a su jugadora más efectiva. La pívot estadounidense fue un dolor de cabeza para el Promete, cuya defensa no daba con la clave.

La paulatina entrada al partido de Lyndra Weaver le ofreció otra cara al Promete. Junto a Diarra y Kovacevic suman poder en ambos aros. Y así fue como en el tercer cuarto el Campus Promete despegó. De entrada, las riojanas endosaron un parcial 0-7 a las bierzanas, que no supieron reaccionar. Intensidad en defensa y alegría en ataque, con Laia Flores, Weaver y Paula Estebas, que acabó con 16 puntos y 20 de valoración, como máximas exponentes para abrir un hueco que el equipo local nunca pudo cerrar (55-67).

En el último cuarto, el Campus Promete contemporizó el juego. Era el Bembibre al que le entraron las prisas mientras que las riojanas supieron mantener las diferencias, jugando con criterio y sin precipitarse, ni en ataque ni en defensa, hasta certificar una gran victoria.

Un triunfo que lleva a las de César Aneas a la zona más tranquila de la clasificación y hunde a las bercianas en la zona de descenso de la Liga Endesa.