Una pequeña joya de la organería riojana
Seguro que los naturales de Uruñuela tienen que estar orgullosos de sus antepasados, que les legaron este precioso órgano de 1762, una verdadera joyita de ... la organería ibérica, con esa caja tan primorosamente ornamentada, que, perfectamente restaurado, pudimos disfrutar el pasado domingo. Es como esas joyas familiares que se trasmiten de generación en generación con inmenso cariño.
La joven organista tarraconense Mar Vaqué Mur fue la encargada de dar vida musical a este venerable instrumento, mostrando sus preciosas sonoridades, dentro de su sencillez de registros y su pequeño teclado. Mar Vaqué luce una sólida preparación técnica, primero en Cataluña y luego en Stuttgart (siete años). Actualmente reside en Múnich donde desarrolla una intensa actividad como organista, directora de coros, docente y concertista internacional. Para este concierto eligió un hermoso programa del Renacimiento español e italiano presentado por ella misma al micrófono, rematando con tres obras plenamente barrocas. Ya en la primera obra, una 'Ensalada' de Aguilera de Heredia, mostró los variados recursos del órgano, con una rica registración y llevando al instrumento al límite de sus posibilidades. Lució posteriormente gran virtuosismo en la Toccata Settima de Claudio Merulo y un dulcísimo fraseo en la Canzon de Andrea Gabrieli. Una de sus mejores interpretaciones de la noche fueron las Variaciones en sol menor del barroco Bernardo Pasquini, resaltando con inteligencia las diferentes bellezas y colores de cada una de las variaciones. Finalizó el programa con brillante garbo en las diversas danzas de la colección 'Flores de música' de Antonio Martín y Coll, dejando el regusto de un concierto redondo y muy bien trabajado, que el público ovacionó con intensidad.
Una maravillosa iniciativa la del Festival de Órganos de La Rioja, que debe tener el mayor apoyo institucional, porque va dando a conocer el sorprendente patrimonio organístico histórico riojano. Estamos hablando en grandes cifras de nada menos que unos ciento cuarenta órganos en nuestra región, de los que aproximadamente la mitad, entre sesenta y setenta, están mejor o peor restaurados para cumplir con su actividad y, entre ellos una treintena están preparados para que los riojanos y nuestros visitantes podamos disfrutar de una actividad concertística del más alto alto nivel. Queda todavía el último concierto del festival, el próximo domingo 16 de julio a las 20.00 horas en la iglesia de Santa María de Briones, a cargo del profesor Jesús Gonzalo López, gran organista y pedagogo, un verdadero apóstol del órgano ibérico que les asombrará con sus interpretaciones y sus amenas explicaciones. No se lo pierdan, si pueden. Un excelente órgano y organista. La entrada es libre.
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