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Virginia López-Negrete.
«¡No se le puede dejar un minuto de gloria, hay que anularla!»

«¡No se le puede dejar un minuto de gloria, hay que anularla!»

Los pinchazos de Ausbanc revelan los fallidos intentos de Pineda por someter a la abogada de Manos Limpias en Nóos y hacerse con el control de todo el proceso

Melchor Sáiz-Pardo

Miércoles, 25 de mayo 2016, 11:58

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Los pinchazos completos del caso Ausbanc, a los que ha tenido acceso este periódico, revelan los fallidos intentos del líder de Ausbanc, Luis Pineda, por hacerse con el control absoluto del caso Nóos y por tratar de someter a la abogada de Manos Limpias, Virginia López-Negrete, a la que insulta constantemente. Dos intervenciones telefónicas del pasado 7 de enero, solo cuatro días antes de las cuestiones previas en las que se debatía la aplicación de la doctrina Botín o no la infanta, revelan que Pineda negociaba con alguien para sacar del banquillo a la hermana del Rey con la aplicación, precisamente, de esa doctrina del Supremo, cosa que no ocurrió.

Las llamadas son entre Pineda y Javier Castro-Villacañas, el jefe de comunicación de Ausbanc, al que Pineda presiona una y otra vez para que se marche a Palma y se convierta en portavoz de Manos Limpias, anulando en lo posible a López Negrete.

No se la puede dejar ese minuto de gloria coño, no se la puede dejar, hay que anularla, además de vez en cuando hasta humillarla un poco, le ordena pineda a Castro-Villacañas. Que haga lo que se la mande, porque cada vez que hace algo que no se la manda me mete en un lío, insiste el líder de Ausbanc en esas dos larguísimas conversaciones.

No dejéis opción a que la tonta esta ocupe el espacio que le corresponde a Miguel (Bernad) y a ti como director de comunicación. ¡Javier, cuélate!, son las instrucciones del capo de la trama extorsionadora, que teme que la actuación de la letrada fastidie un acuerdo para sacar a la infanta. Lo que yo estoy negociando por el otro lado va bienpero no podéis dejar a ésta el espacio!, desvela Luis Pineda.

Castro-Villacañas se muestra reacio a ir a Palma y ve difícil controlar a la abogada y a Bernad, que no hace caso a nadie. Esa noche del 7 de enero, Pineda insiste en que el periodista debe viajar a la isla para no dejar hueco a esta hija puta, en referencia a la abogada López-Negrete.

El que tiene que hablar es Miguel, ella nada. Ella que se coma la sesión, dice Pineda. El jefe de comunicación de Ausbanc, asiente. Ella es tonta del culo. A ella (López-Negrete) no la va a cambiar nadie porque es imposible pues ella se cree que este va a ser el juicio de su vida pero es que va a ser hola y adiós como tu bien sabes, revela Castro-Villacañas, dejando claro que da por hecho la exculpación de la infanta, tras un pacto.

Si encima Miguel (Bernad) contigo le quita el primer dia, se acabó, se felicita Luis Pineda, que insiste en su miedo en que la actuación beligerante de Virginia López-Negrete eche por tierra un acuerdo económico para librar a la hermana del Rey. Tienes que estar tú y controlar tú la situación y hacer de director de comunicación tu, porque Miguel hace lo que quiere salvo que alguien le ayude y se lo trabaje, recomienda el líder de Ausbanc. Hay que tener el control de la comunicación, insiste Pineda.

Castro-Villacañas no la tiene todas consigo. (entre la loca ésta y Miguel.. yo). Ya, ya pero ésta no tiene nada que rascar, o sea al final es Manos Limpias va hacer esto, esto, aquí todo el tema es la doctrina Botín, es decir, Manos Limpias retira la (ininteligible) esta señora afirma Pineda. Y sale limpia, cierra la frase el jefe de comunicación.

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