Borrar
Los vecinos de Villoslada llevan a cabo la ascensión de la Sarga para cubrir el retablo durante los días de la Semana Santa. ::
Una joya pictórica que cobra vida

Una joya pictórica que cobra vida

Villoslada escenifica el Sábado Santo la Pasión que narra su impresionante Sarga

Pilar Hidalgo

Jueves, 13 de abril 2017, 01:00

Necesitas ser suscriptor para acceder a esta funcionalidad.

Compartir

La Sarga de Villoslada de Cameros constituye una joya pictórica única, además de un testigo del esplendor de la localidad en el siglo XVI ligado a la pujanza de la trashumancia y al valor de la lana de las merinas. Sólo así se entiende que esta pequeña población camerana pudiera pagar 42.000 maravedíes, una importantísima suma en la época, para adquirir en 1570 este impresionante lienzo pintado en Flandes para su parroquia, con unas medidas de 10,8 metros de alto por 8,3 de ancho, que lo encumbran como la tela de estas características más grande de la que se tiene constancia.

La Asociación Cultural y Teatral de Villoslada de Cameros La Colodra se propuso hace seis años dar a conocer los valores artísticos de esta joya a través de una iniciativa escénica, que potencia la expresividad de la Sarga. La directora teatral de La Colodra, Virginia Muela, contextualiza que «este tipo de telas cubrían antaño los retablos de las iglesias en señal de duelo y recogimiento durante los días de la Pasión de Cristo».

En Villoslada esta costumbre se abandonó en los años 50 del siglo pasado, el tapiz se guardó y la memoria colectiva olvidó dónde se encontraba. Hasta que en 1994, y en el transcurso de unas obras para restaurar el tejado de la parroquia, apareció un «bulto» que terminó siendo la vetusta Sarga. Villoslada redescubrió este tesoro, se restauró en el Taller del Museo Diocesano de Santo Domingo de la Calzada y comenzó a divulgarse como uno de los mejores exponentes de la pintura religiosa flamenca del siglo XVI.

Frente a la tradicional austeridad de este tipo de piezas, que suelen pintarse en tonos grises, la Sarga villosladense sobresale por su llamativa policromía, lo que supone una rareza en el mundo del arte. «Otra de sus características más divertidas es que sus personajes son anacrónicos. Están ambientados en el Amberes del siglo XVI y no en el Jerusalén de tiempos de Jesucristo», explica Muela.

La representación de la Pasión, que se escenifica este Sábado Santo en la iglesia villosladense en dos sesiones a las 18 y 20 horas, reproduce parte de estos anacronismos. La obra, a cargo del grupo local La Colodra, recupera las esencias del teatro medieval, en el que se ponían en escena las Sagradas Escrituras para transmitírselas a una población que no sabía leer ni escribir. Así, la representación se apoya en las 17 escenas de la Pasión que narra la Sarga, que actúa como marco incomparable. «Parece que sus personajes salen de ella y se convierten en seres de carne y hueso», asegura Muela. Finalizada la Semana Santa, el lienzo volverá a su cofre para «dormir» hasta la próxima, cuando se desplegará de nuevo para cubrir el retablo de la parroquia.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios