«El vino nada tiene que ver con los sexos»

Firma vinos 100 puntos Parker, elaboró el mejor vino del mundo y colecciona premios por su labor enológica, pero María Vargas, directora técnica de Marqués de Murrieta, separa cualquier éxito, o fracaso, de su condición femenina.

- Trabaja para la excelencia, ¿cómo lleva esa presión cuando el vino, la uva, depende de muchos condicionantes externos?

- La búsqueda constante de la excelencia forma parte del ADN de Marqués de Murrieta. Trabajo en modo 'preventivo', para evitar acciones correctivas, que son más invasivas. Hay que prestar una atención constante, 24 horas al día, 7 días a la semana, para adelantarse a los problemas. Estamos ante un producto natural como es la uva, marcado por condicionantes que no siempre son controlables. Aquí es donde te la juegas, a veces aciertas y a veces no..., pero la liga de la excelencia no permite errores.

- El vino también es moda. ¿Cómo afronta estos retos desde una firma centenaria como Murrieta?

- Nosotros no nos podemos mover a golpe de modas; la personalidad de nuestros vinos a lo largo de la historia está definida por las 300 hectáreas de la Finca Ygay. Si hay algo importante en un vino es su alma, su personalidad y, en este sentido, lo más valioso de Marqués de Murrieta es el hecho de poder ver la evolución de sus vinos a lo largo de los años, décadas e incluso siglos. Cuando yo llegué a Marqués de Murrieta, en los años 90, los vinos más reputados eran muy estructurados, tánicos y alcohólicos; ahora sin embargo son las finuras y complejidades las que marcan el paso... Nosotros nos mantenemos firmes. Cuando dieron 100 puntos Parker a nuestro Castillo Ygay Blanco 1986, también se los concedieron a las añadas 1919 y 1932 y para mí es lo más importante: el hecho de que en 2016 otorguen 100 puntos a tres vinos de distintas épocas y con distintos medios. Las modas son pasajeras.

- Colecciona usted reconocimientos. ¿Con cuál se queda?

- Lo más importante de todos ellos es que nos indican que estamos enfocando de manera correcta nuestro trabajo. Los '100 puntos Parker' a nuestro Castillo Ygay Blanco 1986 supuso el reconocimiento a una tipología de vino, con una crianza de nada menos que ¡252 meses en barrica! El 'Mejor vino del mundo' a nuestro Castillo Ygay Tinto 2010 implica el reconocimiento a una larga y consolidada trayectoria de calidad y el de 'Enóloga del año' lo recibimos como un premio a todo un equipo que trabaja duramente. Personalmente, lo que más ilusión me hace de estos premios es que son internacionales y es muy meritorio destacar entre la gran cantidad de vinos y zonas de calidad de todo el mundo. Dicho lo cual, hay que ser muy prudentes con la importancia que se les da.

- Ha dicho en alguna ocasión que el vino no entiende de sexos. ¿Qué quiere decir?

- Los 'ingredientes' para hacer un buen vino son, además de buena uva, sensibilidad, paciencia, sinceridad, equipo humano, y herramientas tecnológicas. No tiene nada que ver con los sexos o con el hecho de que la responsabilidad recaiga sobre una mujer o un hombre.