El sector del vino dispondrá de una base de datos con toda la información relevante
Con casi un millón de euros de presupuesto de los fondos Next Generation e impulsado por el Gobierno de La Rioja, el proyecto Enodatalake entra en su segunda fase, con la invitación a los agentes vitivinícolas
La bodega institucional de La Grajera ha acogido este lunes la presentación de un proyecto que busca aglutinar toda la información relevante del sector del vino a través de una herramienta, llamada Enodatalake, que se podrá consultar de forma universal por todo aquel agente interesado y que permitirá tanto desarrollar trabajos de investigación como generar productos y servicios.
El consejero de Hacienda, Alfonso Domínguez, y la responsable de Agricultura, Noemí Manzanos, han ejercido de maestros de ceremonias en la presentación de Enodatalake, con la pretensión de impulsar el conocimiento y la puesta en común de la información más importante que deben manejar los sectores involucrados en el mundo del vino de Rioja.
Domínguez ha explicado que «este proyecto transformador e innovador para, a través de un espacio de datos, dar un paso adelante en la competitividad y productividad del sector del vino», es prueba de que «somos un Gobierno cercano, que quiere ir siempre de la mano de las empresas, asociaciones y entidades de cada uno de los sectores» estableciendo foros de «diálogo y colaboración». Por su parte, Manzanos ha subrayado que este espacio de datos «ayudará a que sea un sector más rentable, competitivo y sostenible, al tener toda la información en un solo click».
El presupuesto de este nuevo entorno tecnológico asciende a casi un millón de euros (968.322,32 euros), dentro del programa Agroalnext financiado con fondos Next Generation, lo gestionará una UTE creada para tal efecto por las empresas JiG, Bosonit y Telefónica. De momento, la cita en La Grajera de este lunes trataba de ser un encuentro para dar a conocer a los sectores enológicos el proyecto y una invitación para que se involucren en él. Se trata esta, pues, de la segunda fase del proyecto (la primera, en palabras de Domínguez, fue la definición de la estrategia). La tercera etapa, más tecnológica, de desarrollo técnico y recopilación de los datos, tiene prevista su culminación a finales del 2026.
Como un mero ejemplo, marcaba la consejera Manzanos la importancia de que el Observatorio de Precios y sus datos sean accesibles desde cualquier sitio y en cualquier momento. Se trata, contaba la consejera, de que los productores, los bodegueros, las comercializadoras... estén al día de toda la información posible con datos precisos y en tiempo real, sin necesidad de recurrir a la vaguedad estadística.
