Murrieta estrena calle y repite críticas
La redistribución del espacio de la vía, con prioridad para peatones y ciclistas, levanta recelos entre los comerciantes como ya pasó en Duquesa de la Victoria
La reforma ya ha terminado, y como pasó antes y durante las obras, está dando que hablar. Murrieta estrena calle y, visto lo visto y oído lo oído, repite críticas. La redistribución del espacio, con prioridad para peatones y ciclistas, levanta recelos entre los comerciantes como ya pasó en Duquesa de la Victoria.
Si bien ambas actuaciones son diferentes, que tengan como elemento en común la reducción de la zona de calzada para el vehículo privado a fin de dárselo a la bicicleta y otros modos de transporte, suscita los temores de los negocios asentados en el tramo comprendido entre las rotondas de 'Las Palmeras' y de Carmen Medrano.
Hay quien habla de 'yincana' en su intento de visibilizar el caos y la confusión que, a su juicio, genera lo proyectado para los conductores, aunque no falta quien reconoce que los que van a pie, en bici o en autobús salen ganando con el cambio. Este martes, día de su inauguración oficial, las autoridades valoraron lo hecho en pro de una ciudad «más sostenible, saludable y segura».
El alcalde de Logroño, Pablo Hermoso de Mendoza, destacaba una actuación «que redistribuye el tráfico, añade carriles bici, amplía aceras y crea y mejora nuevos pasos peatonales». Una actuación que ha dado como resultado una nueva Murrieta sin semáforos y sin giros a la izquierda, con un carril por sentido para coches y otro para bicicletas y una calzada sinuosa para reducir la velocidad.
«Con tanto obstáculo para la circulación y sin casi aparcamiento, para bares y comercios como que no»
David Miguel | Café Murrieta 34
«El futuro es esto, está claro, y una vez hecho toca ser constructivo. Es difícil contentar a todo el mundo»
Alejandro Sáenz | Frutas Alejandro
Una nueva calle, en la práctica, que simboliza, junto a República Argentina, por ejemplo, «lo que se quiere», en palabras de Hermoso. Que no es otra cosa que una reforma que, como las del conjunto de 'Calles Abiertas', «beneficia a la gente que camina», además de seguir completando una verdadera red ciclable este-oeste en la capital de La Rioja.
«Yo estoy encantado por lo que supone el paso de peatones elevado para cruzar al Palacio de Justicia que por fin nos han construido, en el resto no entro al ser cuestiones urbanísticas», sentenciaba a pie de calle Javier Marca, presidente del TSJR.
Con vecinos a favor y en contra según su condición de peatones, ciclistas o conductores, el comercio sí que considera que la actividad en la calle, con la 'reurbanización', saldrá perjudicada con la pérdida de espacio para el vehículo privado. Hay excepciones, claro. «El futuro es esto, eso está claro, y una vez hecho toca ser constructivo... Es difícil contentar a todo el mundo, y lo peor que veo es que los contenedores se los han llevado a las calles transversales y a mucha gente mayor no le quedan cerca», dicen desde Frutas Alejandro.
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«¿Más bonita? Puede ser, pero con tanto obstáculo para la circulación y sin casi aparcamiento, para comerciantes y hosteleros como que no...», reflexiona David Miguel, del Café Murrieta 34. «No se puede planificar un carril bici que atraviesa la ciudad de la noche a la mañana», protesta.
«Vale, han dejado una calle para pasear, pero... ¿y para vender?», espetan desde 'La Abuela', tienda de alimentación que recuerda que antes, al menos, había zona azul para estacionar. «Nuestros clientes se están volviendo locos», precisa Ismael, de la Floristería Pothos, en ese mismo sentido.
«Habrá que ver los atascos que se montan en septiembre, pues no podemos olvidar que esta es una vía de acceso al centro... el tema enciende porque la verdad es que da asco coger el coche, pero es que nosotros lo vemos lioso hasta para peatones y ciclistas», comentan JuanCarlos y Fernando. «Yo no tengo coche, pero mis nietos van en bici», precisa Julián, otro vecino.
«Antes había doble fila, estamos de acuerdo, pero ahora ya se ha visto algún 'casi atropello'»
Marcos Castro 1 Zapatero
«Para vender no ayuda, y el cambio de sentido en la calle Vitoria provoca mucha confusión»
John E. González | Frutería J. B.
«Habrá que ver los atascos que se montan en septiembre al haber dejado un solo carril por sentido siendo vía de acceso»
Juan Carlos y Fernando | Vecinos
Vecinos y comerciantes, eso sí, reconocen que antes Murrieta era una calle de doble fila y con las obras, ahora, se ha terminado. «Había otras soluciones menos drásticas», apunta Mercedes. «Antes doble fila, vale, pero ahora ya se ha visto algún 'casi atropello'», informa Marcos, el 'zapatero'. «Me parece un auténtico galimatías», espetan desde una tienda de ropa que prefiere mantenerse en el anonimato, por no hablar de la «poca carga y descarga».
Al respecto, Hermoso –acompañado por la delegada del Gobierno, María Marrodán–, se refería precisamente a esa carga y descarga, «pensada para que por la mañana se pueda hacer uso de la misma para las necesidades logísticas de la calle, y por la tarde se use como aparcamiento».
Un «nuevo ejemplo práctico y claro de la mejora de la movilidad urbana pensando en la convivencia», según la citada Marrodán, que avala los cambios. Aunque desde el local J. B. ponen 'peros': «Cambios de sentido como el de la calle Vitoria, provocan no poca confusión y ya hay quien se ha 'comido' las jardineras».
«El PP, judicializando el eje ciclista, deja de ser conservador para ser inmovilista»
El alcalde, Pablo Hermoso de Mendoza, se refirió ayer al recurso presentado por el PP contra el eje ciclista que va del Espolón al Cubo. Que el principal partido de la oposición lleve a la vía contencioso-administrativa tal licitación es visto por el regidor municipal como «prueba del inmovilismo» de los populares en Logroño. «Hay dos visiones, la de los que creemos que la ciudad debe avanzar en este modelo, y la de los que no solo no quieren avanzar, sino que quieren retroceder». «Ahí está el PP, quien deja de ser conservador y pasa a ser inmovilista», aseveró.
