Un trabajador extranjero en La Rioja cobra de media al año 8.500 euros menos que uno nacional
«En algunos sectores la diferencia es mucho mayor», advierten desde UGT al analizar los datos que ofrece la encuesta de estructura salarial del INE
¿Cuánto cobra un trabajador al año en La Rioja? Esa es una de las preguntas a la que da respuesta la encuesta de estructura ... salarial que ha publicado esta semana el Instituto Nacional de Estadística. Un informe que señala que el sueldo medio anual en la región fue de 26.319,06 euros en 2023. Más allá de eso, la encuesta contesta a otras cuestiones y una de ellas es la diferencia entre lo que cobra un trabajador nacional en la comunidad autónoma y uno extranjero. Y la brecha entre ambos colectivos se sitúa en 8.500 euros anuales.
Esta es la primera vez que el INE da un dato consolidado en este terreno en La Rioja, puesto el escaso muestreo de trabajadores extranjeros hasta 2022 provocaba «una gran variabilidad» en los datos. En 2023, ese muestreo se ha ampliado para certificar que los nacionales cobran de media al año 27.282 euros en la región, mientras que los foráneos no llegan a los 19.000 brutos (18.830). «Son datos macroeconómicos que no van detallados por sectores y que, al tratarse de medias, esconden diferencias», señala Isabel Blanco, secretaria de Política Sindical de UGT. «Las medias hacen una compensación y todavía hay gente que cobra bastante menos de lo que dice el informe; en algunos sectores la diferencia es mucho mayor», apostilla.
En relación a las razones que explican esta diferencia, Blanco lo tiene claro. «Los trabajadores extranjeros tienen mucho más limitado el acceso al mercado laboral que los españoles», reflexiona. «Y acaban trabajando en aquellos puestos en los que, como vulgarmente se dice, nosotros no queremos trabajar», añade.
Recuerda Blanco igualmente que muchos de estos trabajadores de fuera van a parar a sectores como «el de la hostelería, el de cuidado de las personas mayores o incluso el agrícola» para obtener un salario. «Y algunos, aun con convenios colectivos en vigor, suelen ser carne de cañón para aquellos empresarios que no siguen las normas legales; y se ven mucho más discriminados», se queja la secretaria de Política Sindical de UGT.
La encuesta que ofrece el Instituto Nacional de Estadística no desgrana los datos por nacionalidades, por lo que no se puede observar si un ciudadano cobra más o menos dinero dependiendo del país del que procede. Aun así, Blanco concluye que «el que proviene de países europeos tiene más opciones que el que viene de África o incluso de Latinoamérica».
«Si las mujeres sufrimos discriminación, las mujeres inmigrantes sufren el doble»
Además de la brecha existente entre los trabajadores extranjeros y nacionales, la encuesta del INE también recoge la diferencia de sueldos entre la población masculina y femenina. Así, a nivel regional se concluye que los hombres ganan al año 28.482 euros de media, mientras que las mujeres se quedan en 24.307, por lo que la distancia entre ambos géneros se ensancha hasta los 4.174 euros.
Eso es a lo que la población general se refiere, pero si entra en juego la variable de la nacionalidad se comprueba que las distancias son incluso mayores. No en vano, una mujer española gana de media, según ese informe, 25.192 euros al año, mientras que los ingresos por trabajo de una foránea descienden a los 16.153 euros, aunque en este caso la cifra puede presentar variabilidad por el escaso muestreo. Aun así, la diferencia es superior a los 9.000 euros. «Si las mujeres ya sufrimos discriminación, las mujeres extranjeras sufren doble discriminación», lamenta Isabel Blanco, secretaria de Política Sindical de UGT.
Blanco concluye que «la discriminación existe» en el ámbito laboral y más si se acude a estos grupos de población que tienen más dificultades para acceder a un puesto de trabajo. «En determinados convenios que van por categorías, vemos que las más bajas son ocupadas por personas de fuera, haciendo las mismas tareas que sus compañeros nacionales», avisa. «Si ya existe una brecha salarial entre el salario medio de hombres y mujeres, imagínate si nos remitimos a estos colectivos todavía más vulnerables; las diferencias se amplían aún más», añade.
Para acabar, la secretaria de Política Sindical de UGT pone un ejemplo de esas condiciones desfavorables. «Si hablamos del cuidado y la asistencia a domicilio, hay muchas personas que todavía o no están contratadas o no se reflejan las horas reales por las que están trabajando», concluye.
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