«El PSOE defiende de 'boquilla' la libertad de enseñanza, sus acciones demuestran lo contrario»

Corren tiempos convulsos para la enseñanza concertada. Si hasta ahora navegaban con un suave viento de cola, con el cambio de Gobierno parecen remar contracorriente. Una de las primeras medidas de calado del Ejecutivo de Concha Andreu ha sido suprimir el 'cheque-Bachillerato'. Una cantidad que a partir de enero dejarán de percibir las 726 familias cuyos hijos estudian en centros privados. Los padres de la red concertada se sienten los 'paganinis' de un pacto que ha permitido a Concha Andreu ser la nueva inquilina del Palacete de Vara de Rey. «Se está intentando llevar a un enfrentamiento entre la red pública y la red concertada cuando está demostrado que son redes complementarias», apunta Carlos Torres, presidente de la Confederación Católica de Padres de Familia y padres de Alumnos, CONCAPA-Rioja.

- ¿Como han recibido la eliminación del 'cheque-Bachillerato?

- Lo veíamos venir porque por más que quiera el Gobierno dejarlo a un lado, hay un pacto de gobernabilidad que decía claramente tres cosas: que se iba a eliminar el concierto de Bachillerato, que se iba a suprimir el concierto de Alcaste y que se iban a ir reduciendo los conciertos. Lo dice el pacto de Gobierno con IU y Unidas Podemos. Con lo cual, lo esperábamos, lo que no esperábamos era la que la primera medida de la Consejería de Educación empezado el curso fuese eliminar el 'cheque- Bachillerato'.

- ¿Qué duele más que supriman los 50 euros al mes por familia o que hayan cambiado las reglas de juego a mitad de partido?

- No son los 50 euros, no es un problema de dinero, es una cuestión ideológica. Al final, lo que hay que mirar es qué hay detrás de esta eliminación. Hay una cuestión bien clara. Detrás de cada alumno que el otro día estuvo en la Consejería, hay una familia que por el hecho de elegir un centro católico para Bachillerato tiene que pagar 3.000 euros por año. Un Gobierno que se dice progresista, que está en pro de la igualdad y de la no discriminación, lo que ha hecho es discriminar a las familias que eligen un centro católico eliminando este cheque.

- ¿Qué diría a aquellos que criticaban que los chavales que el otro día protestaron acudiendo a la Consejería para pedir información sobre las plazas libres de Bachillerato en la pública debían estar en clase y que estaban siendo utilizados?

- Ese día los chavales aprendieron dos cosas: a defender sus derechos y a saber cómo reclamar a la administración algo por la vía del respeto. Lo que hicimos es utilizar el punto público de registro para reclamar un derecho.

- Las voces críticas también han pedido que el próximo curso se contabilicen cuántos de los chavales que solicitaron información cambian finalmente de centro

- Se está dando mucha importancia al tema de las plazas. Nosotros solo pedimos información. No estamos diciendo que las familias se quieran cambiar de centro, por supuesto que no se quieren cambiar de centro. Lo que estamos diciendo es que nos han aplicado un recorte empezado el curso y puede que haya familias que verdaderamente tengan un problema con esto y tendrán que ver sus opciones. Queremos decir que este recorte no se debe a intereses presupuestarios, se debe a algo más.

- ¿Se sienten utilizados?

- La palabra es discriminados. Se está provocando un enfrentamiento entre la red pública y la red concertada cuando está demostrado que son redes complementarias y se necesitan. Hay una serie de cuestiones que se suelen lanzar a la opinión pública que resultan preocupantes, como cuando el subdirector general de Educación dijo el otro día: «El que quiera educación privada que se la pague». Eso es una forma interesada de enfrentar, porque cuando decimos educación privada parece que estamos hablando de otra cosa. Es sustituir la palabra, el que quiera educación en un centro católico que se la pague, porque esa es la realidad. La única diferencia que hay entre un centro público y uno privado o concertado es el ideario. El artículo 27.3 de la Constitución dice que los poderes públicos garantizarán a los padres educar a sus hijos conforme a sus creencias religiosas y morales y el hecho de que existan colegios concertados garantiza que exista esta libertad de enseñanza. Hay un problema y es que hay partidos como IU y Podemos que llevan en su ADN que quieren una educación pública, laica y única, y eso es una educación excluyente porque no contemplan otra posibilidad. Nos están intentando enfrentar, pero no vamos en contra de la educación pública, al revés, como padres nos interesa que la educación pública sea de calidad, pero lo que queremos es que además de la pública tiene que haber una red alternativa que puedas elegir. No es cierto que la concertada límite los recursos de la pública y hay gente que se lo cree y al final te acabas enfrentando con los padres de la pública que dicen: 'Nos quitáis el dinero'. ¿Qué dinero? Si son nuestros impuestos igual que los suyos.

- ¿Sienten que reman a contracorriente?

- Por desgracia, lo que ocurre ahora es que para poder gobernar el Ejecutivo actual tiene que contar con unos partidos que están en contra de una serie de cuestiones que el propio PSOE no las tiene tan claras. Lo que pasa es que el PSOE defiende de 'boquilla' la libertad de enseñanza porque con sus actuaciones demuestra que no está de acuerdo.

- ¿Entiende que aleguen que la supresión es una cuestión económica y, como critica el PP, se cree una Consejería con nueve altos cargos cuyo coste supera los 400.000 euros del 'cheque-Bachillerato'?

- La reflexión cualquiera la puede hacer. Cuando nos mandó la carta el consejero el mismo día que lo hacía público, explicaba que era en aras de un equilibrio presupuestario y dices: ¿Cómo es posible que un coste que supone el 0,1% del presupuesto educación sea tan prioritario y veas que no se han tomado ningún otro tipo de medidas económicas en ningún otro aspecto? Tampoco quiero poner en duda que la Consejería de Participación y Derechos Humanos sea imprescindible en La Rioja. Yo también me cuestiono si esa cartera es importante en cuanto a gasto público, quizá sí.

- ¿Qué pasos van a dar ahora?

- Cada vez que veamos que se vulnera la libertad de enseñanza, vamos a movilizar a los padres y a salir donde haga falta, le pese a quien le pese, porque es la única manera de hacer valer nuestros derechos. Este Gobierno es muy contradictorio, tan pronto te hablan de igualdad, de no discriminación y luego las medidas son discriminatorias hacia una parte de la población. Es discriminatorio por mucho que les duele oír discriminatorio, y las familias que van a la concertada no son todas familias pudientes. Si siguen tomando estas medidas sí que va a ocurrir eso porque al final una familia con alto poder adquisitivo siempre va a poder elegir lo que quiera, pero la Administración está para que aquellas familias con menor poder adquisitivo también puedan elegir.

-Y luego está Alcaste.

- Aquí utilizan una vez más la palabra segregación de forma interesada para mandar a la opinión pública una idea que no es real. Esto se llama educación diferenciada. Nos guste o no es un modelo educativo y los padres que lo eligen lo hacen en libertad, a nadie le obligan a ir a Alcaste. Las sentencias dan la razón porque lo que dice el Tribunal Constitucional, y el Supremo, es que no es una educación segregatoria, sino diferenciada, es una elección que tienen las familias y está dentro de esa libertad de elección.