Los pisos turísticos ganan 1.200 plazas en cinco años y superan a hoteles y campings
La región cuenta con capacidad para 7.660 personas, un 20% más que en verano de 2020, y la oferta crece sobre todo en La Rioja Alta
El turismo vive un momento especialmente dulce en los últimos años. Tras el obligado repliegue provocado por la pandemia y sus coletazos, ha crecido de ... manera desbocada. El modelo, eso sí, ha cambiado y ha emergido con fuerza la figura del piso turístico. A pesar de que La Rioja es una comunidad pequeña, la oferta está aumentando de manera notable. Así lo dicen los últimos datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), que ya contabilizan 1.360 viviendas repartidas a lo largo de 113 municipios de una región que aspira en 2025 a superar el récord de visitantes del año pasado, cuando se contabilizaron casi 835.000 turistas –va por ese camino porque en el periodo enero-mayo registra ya un incremento superior al 10%–.
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La mitad de las plazas de Logroño están en el Casco Antiguo o en el centro
Hay 241 pisos turísticos más que hace cinco veranos y, por consiguiente, la oferta de plazas es muy superior, en concreto de 7.660, por las 6.401 de agosto de 2020 –el crecimiento es del 19,7%–. Cada vez hay más municipios que están abriendo este tipo de viviendas y por ejemplo en este lustro se ha sumado una veintena larga . Logroño, por supuesto, figura a la cabeza, con casi el 40% de las plazas, 2.811 en total distribuidas en 514 viviendas repartidas por el callejero de la capital, sobre todo en las zonas más céntricas y en el Casco Antiguo.
Este boom ha hecho, por ejemplo, que la cifra de plazas en pisos turísticos en mayo –los datos se extraen de las tres 'apps' de reservas más utilizadas y son tratados con programas de software para eliminar posibles duplicidades– sea superior a la que ofrecen los hoteles en La Rioja (7.366) o los campings (7.481); las casas rurales están muy por debajo (1.087), según los datos del portal de estadísticas del Gobierno regional. En Ezcaray y Haro, dos de los principales enclaves turísticos –la proximidad con el País Vasco juega claramente a su favor–, también se ha registrado en estos últimos cinco años un aumento de plazas, del 27% y del 12%, respectivamente.
«La iniciativa privada ha visto una oportunidad de inversión en Nájera y la llegada de turistas le está dando la razón»
Muy por encima está el crecimiento que se ha vivido en Nájera desde verano de 2020. «Aquí la iniciativa privada ha apostado de manera decisiva en los últimos tiempos por invertir en la rehabilitación de casas como pisos turísticos. Ha visto una oportunidad de negocio y los datos de llegada de visitantes están dando la razón», asevera el alcalde najerino, Jorge Salaverri. De las 16 viviendas se ha pasado a 37, según los datos más recientes del pasado mes de mayo, y de una capacidad para 88 plazas a 195, un 121,6% más.
El Camino de Santiago
«Y la ocupación está siendo alta», destaca el regidor, «porque Nájera es un enclave importante en el Camino de Santiago y por aquí pasan muchos peregrinos». Aunque los atractivos «van más allá, aquí con el Monasterio de Santa María la Real, por ejemplo, pero en la comarca con otros monasterios como de los Yuso y Suso en San Millán de la Cogolla o Cañas».
Salaverri también recuerda que «el turismo deportivo, de rutas de montaña, está teniendo mucho éxito en la zona en los últimos tiempos» y ante una oferta hotelera que no es muy abundante «la oferta de pisos turísticos está ofreciendo un servicio muy interesante».
En este sentido, la presidenta de la Asociación de Viviendas de Uso Turístico de La Rioja (Arvutur), Susana Díaz, sostiene que este modelo de negocio «está despuntando». Con la pandemia, «la gente se hizo más individualista, quería tener su propio espacio y compartirlo con un grupo reducido de gente», detalla, «y los pisos ofrecen esta posibilidad». Por ello, da por buenos estos datos del INE y constata el crecimiento «sobre todo en Logroño» –donde Arvutur tiene la mayor parte de sus socios, en total unos 115 con alrededor de 130 viviendas en propiedad– «pero también en La Rioja Alta».
En cambio, en el otro extremo de la comunidad el número de pisos es muy inferior, «aunque poco a poco empieza a haber inversiones en reformar casas con finalidad turística. También es una manera de dar vida a nuestros pueblos», concluye.
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