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El nuevo contrato de comedores escolares sube un 60% y endurece sus condiciones
El Gobierno saca el pliego a licitación por 6 millones, 2,3 más que el último adjudicado a Serunión, y ahora podrá imponer multas por la mitad de la facturación mensual
Mayor cuantía económica y también mayores sanciones en forma de incumplimientos. Son las dos principales características del nuevo contrato de comedores escolares para cuya licitación el Ejecutivo de La Rioja ha autorizado un gasto de 5,99 millones de euros, según ha aprobado hoy en su reunión semanal del Consejo de Gobierno. Esta cifra es notablemente superior a la que percibirá la empresa Serunión hasta que finalice su contrato anual, este próximo 31 de diciembre, y cuya adjudicación final alcanzó los 3,7 millones.
El gabinete de Gonzalo Capellán quiere primar en esta nueva licitación la calidad de los menús, y por ello el precio diario se eleva de 4,59 euros a un mínimo de 6,75 «y no se aceptará ninguna oferta por debajo de ese precio», ha ratificado el portavoz, Alfonso Domínguez. Con el incremento se busca que las comidas de los 4.296 alumnos atendidos tengan verduras y hortalizas de origen ecológico, productos con Denominación de Origen Protegida (DOP) o Indicación Geográfica Protegida (IGP) y que la comida tarde menos tiempo desde que es elaborada hasta que se transporta a los colegios.
El contrato, que tendrá una duración de un año, será tramitado por vía de urgencia con el objetivo de que se pueda adjudicar en un plazo máximo de tres meses. El pliego se dividirá en cinco lotes y un mismo adjudicatario no podrá optar a más de dos salvo que alguno quede desierto.
4.296 alumnos riojanos
repartidos entre 2.746 de Educación Primaria y 1.550 de Infantil, de un total de 58 colegios son atendidos por el servicio de comedores escolares. Se reparten durante cada curso 751.800 menús. Con el nuevo contrato, el precio del menú diario se incrementa de 4,59 euros a 6,75.
Lo que es seguro es que Serunión no estará entre los aspirantes. A partir del 31 de este mes finaliza su vinculación con los centros escolares de La Rioja y ha decidido abrir un paréntesis en la actividad en nuestra región por la «falta de confianza y la tensión» con la que ha tenido que desarrollar su trabajo desde septiembre, asegura la propia compañía, cuando aparecieron las primeras larvas en algunos menús.
Petición de IU al Ministerio
A partir del 1 de enero y hasta que llegue la nueva empresa, la Consejería de Educación contratará de forma provisional este servicio de comedores con otra empresa y ya maneja diferentes alternativas. El nuevo contrato, ha detallado Domínguez, también incorpora entre sus condiciones la posibilidad por parte del Gobierno de resolver el contrato de manera unilateral si existen incumplimientos graves. Asimismo, el Ejecutivo también podrá aplicar sanciones económicas más elevadas que las actuales y que podrían llegar al 50% de la facturación mensual.
Por su parte, la diputada de IU en La Rioja, Henar Moreno, anunció que en enero mantendrá una reunión con la ministra de Juventud e Infancia, Sira Rego, para pedir implicación económica con las comunidades para que los comedores escolares garanticen la alimentación no solo durante el periodo lectivo sino todo el año. «Estamos en un país con unos niveles de pobreza escandalosos y debemos trabajar para asegurar a los niños comida en condiciones de calidad al menos una vez al día», aseguró, y también ayudaría a «la conciliación laboral de los padres y serviría para evitar la estigmatización».
