La diócesis envía a la Fiscalía tres casos de presunta pederastia cometida por religiosos en La Rioja
En manos del Ministerio público obrarían otros tres supuestos abusos sexuales que ocurrieron en Logroño entre 1960 y 2021
La diócesis de Calahorra y La Calzada-Logroño ha enviado a las fiscalías de La Rioja y General del Estado todos los datos que ha obtenido sobre tres supuestos casos de pederastia en el seno de la Iglesia católica.
Se trata, según ha informado la diócesis, de tres presuntos abusos sexuales que habrían cometido dos religiosos ya fallecidos, sobre tres víctimas. Dos de ellas, cuando ocurrieron los hechos, eran menores de edad.
El más antiguo de los casos de presunta pederastia ocurrió entre 1971 y 1975 en un colegio Salesiano situado en Logroño. El autor de los hechos sería un religioso de la congregación que habría abusado de un menor de edad.
El otro de los supuestos agresores era el sacerdote V.L.T.. En este caso la Fiscalía investiga si abusó de dos jóvenes, uno de ellos menor de edad en la Casa del Sacerdote en el municipio de El Rasillo de Cameros entre 1994 y 1997.
La diócesis riojana tuvo conocimiento de los hechos a raíz de la publicación de los casos por un medio de comunicación nacional (El Pais) y, una vez conocidos, se puso en contacto con las presuntas víctimas que en ningún caso quisieron interponer denuncia ni civil ni canónica.
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Estos no serían los únicos asuntos relacionados con la pederastia en poder de la Fiscalía, aunque sí son los únicos remitidos por la diócesis riojana. Sobre la mesa del Ministerio público también obrarían otros tres supuestos. El más reciente habría sido cometido en 2021 en el colegio Inmaculado Corazón de María (Escolapias), en Logroño. El asunto está en manos de la justicia aunque el supuesto autor, un trabajador del centro se suicidó tras conocer que se había presentado una denuncia. Los otros dos también se habrían cometido en la capital riojana los años 1960 y 1975.
El pasado año el Ministerio Público ordenó a las fiscalías superiores de España que remitieran, en un plazo de 10 días, todas las causas que estuviesen actualmente en tramitación sobre agresiones y abusos sexuales a menores, cometidos por religiosos.
