Las denuncias de tráfico en La Rioja subieron el 40% en 2023, la mayor alza de España
La Guardia Civil impuso 37.704 sanciones durante el pasado año, 10.000 más que en 2022
Las denuncias firmadas por la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil en La Rioja registraron el pasado año un aumento histórico. En total, según ... la estadística del Ministerio del Interior, se notificaron 37.733 sanciones, que suponen más de un centenar al día y un 39,01% más que el año pasado, cuando se firmaron 27.144. De esta forma, La Rioja se convirtió en la comunidad donde más crecieron las intervenciones sancionadoras de la Guardia Civil de Tráfico, 14 puntos porcentuales más que en Navarra, la segunda región con mayor incremento. Mientras, en el conjunto nacional se observa una disminución del 0,45%.
De esta forma, en las carreteras riojanas durante 2023, la Guardia Civil tramitó más denuncias que en toda Asturias (34.298), en Cantabria (32.889) o que en la provincia de Zaragoza (34.900), zonas con una mayor población y también mayor número de desplazamientos.
¿Han empeorado drásticamente los riojanos su conducción? Aparentemente no. Desde AUGC La Rioja, la asociación que vela por los derechos de los agentes, se adelantan varias causas. La primera, el cambio en la metodología de trabajo, especialmente en lo que respecta a los radares. Antes, defienden que esta herramienta ejercía una labor «educadora», con la máquina dispuesta en un lugar y otra patrulla más adelante que paraba al conductor y le informaba del exceso de velocidad. Ahora explican que el radar sale a las carreteras con un solo agente, que aposta el coche camuflado y 'retrata' a los que incumplen los límites. De la misma forma, han crecido las denuncias por radares fijos.
También desde la agrupación se esgrime que existe un interés en mejorar la 'productividad', es decir, el número de sanciones. Porque cuantas más se tramiten más cerca está el agente de lograr un bonus económico, lo que genera «competencia entre compañeros y unidades y mal ambiente de trabajo». Además del trabajo 'a destajo' de los radares, también se han intensificado los controles de alcohol y drogas.
Este aumento de las denuncias choca frontalmente con otra realidad que está viviendo la Agrupación de Tráfico en La Rioja, como es la falta de efectivos, un aspecto que no ha sido confirmado por las fuentes oficiales, que aseguran que esas cifras no se publican. Porque, mientras las sanciones crecen, los datos que estadísticamente muestran el trabajo de campo de los agentes decaen. Por ejemplo, en 2022 los uniformados recorrieron 1,38 millones de kilómetros. Y en 2023 esa cifra cayó en 163.000 (un 11,77% menos), un descenso que coloca a La Rioja como la comunidad donde más se recortaron los trayectos.
1,22 Millones
de kilómetros realizaron los guardiaciviles de La Rioja durante 2023. Un año antes la cifra ascendía a 1,38 millones, lo que signfica una disminución del 11,77%.
5.852 Patrullas
se llevaron a cabo en la región, en las que se invierten 89.032 horas, diez mil menos que en año antes.
122 Detenidos
o investigados en La Rioja durante 2023 por consumo de alcohol y drogas al volante. Otros 83 también fueron encausados por Tráfico por conducir sin permiso o con este caducado.
También se desplomaron el número de patrullas de Tráfico y las horas invertidas por estas. Si en 2022 se contabilizaron 6.492 patrullas, en 2023 el número cayó a 5.852 (un descenso del 8,97%, también el mayor de España). Y el número de horas invertidas en patrullas pasó en un año de rozar las 100.000 (99.987) a caer hasta las 89.032, el 10,96% de descenso, otro 'oro' en el ránking nacional. Estos datos corroboran la percepción de la AUGC, que defiende que el descenso en el número de guardias civiles de Tráfico está mermando el servicio.
Menos detenidos
Si las sanciones 'leves', es decir, las económicas, se multiplican, el número de detenidos e investigados descendió. De 140 por consumo de alcohol o drogas al volante se pasó a 122, de tres detenciones por exceso de velocidad se redujo a solo una, de 87 actuaciones por conducir sin permiso (o con este retirado) se pasaron a 83 y por otros delitos descendieron de 68 a 50.
Y, tal vez lo más grave, es recordar que a pesar del alza de las denuncias, las carreteras riojanas vivieron un 2023 más negro que el año precedente, pasando de diez a once víctimas mortales en vías interurbanas.
Atestados bajo mínimos y refuerzos desde Pamplona
El del personal de la Guardia Civil en La Rioja es un problema que se está cronificando. De resultar una región atractiva para los uniformados, se ha convertido en una zona de paso (casi siempre obligado) antes de emprender otros destinos más atractivos por cuestiones económicas o de servicio. Recientemente, la Delegación de Gobierno daba la bienvenida a 84 agentes de Seguridad Ciudadana a los que se sumarán otros 15 en septiembre. Mientras, para Tráfico llegarán once agentes que reforzarán los destacamentos de Logroño, Calahorra y Santo Domingo de la Calzada. Desde AUGC La Rioja se estima que, con la plantilla al completo, esta debería superar los 130 agentes, pero que ahora faltan al menos una veintena, cifra que no ha sido confirmada por fuentes oficiales.
Y la situación más preocupante la vive el servicio de Atestados, donde de 21 puestos actualmente trabajan siete agentes, por lo que durante este verano, las investigaciones de accidentes recaerán en un solo agente en turnos de hasta 24 horas. Al servicio ya se le ha anunciado que recibirán refuerzos desde Pamplona, lo que consideran «un despropósito» debido a la distancia a recorrer y la tardanza en poder cubrir cada llamada. «La investigación de accidente, que afecta al ciudadano, se va a ver muy limitada mientras el potencial sancionador crece», resaltan. También explican que esta situación ha provocado el descenso en el número de atestados o la supresión de los informes de carretera: la revisión por parte de los agentes y a pie de asfalto de la señalización, problemas de firme u otros defectos de las vías.
Además, desde el año pasado se dispuso un servicio de atención en diferido para que conductores que han sufrido un percance leve en las carreteras puedan tomar fotografías, recibir un número de referencia y, posteriormente, llevar a cabo la instrucción sin necesidad de desplazar a agentes.
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