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JAVIER ALBO
Agroseguro cuantifica daños ya en 2.140 hectáreas de cultivo, casi mil de viñedo

Agroseguro cuantifica daños ya en 2.140 hectáreas de cultivo, casi mil de viñedo

La bajada de las temperaturas ofrece una 'minitregua' ante los hongos, aunque la gran preocupación ahora sigue siendo poder entrar en las finca

Alberto Gil

Logroño

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Jueves, 17 de junio 2021

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Agroseguro cuantifica ya daños en 3.915 parcelas y 2.140 hectáreas de cultivo aseguradas en La Rioja -otras tantas podría haber no cubiertas por pólizas-. En cualquier caso, es una primera estimación, explica la entidad, porque, aunque la tormenta de pedrisco más dañina se produjo el lunes 14 de junio, «tenemos constancia de nuevas tormentas producidas los días 15 y 16, por lo que tienen que llegar muchos siniestros más en los próximos días». Los cultivos más afectados son fruta (414 hectáreas), viña (984 hectáreas), cereal (524 hectáreas), remolacha (26 hectáreas) y hortalizas como patata y guisante verde (192 hectáreas). Principalmente, el pedrisco ha afectado a los términos municipales de Entrena, Fuenmayor, Navarrete, San Asensio y Villar de Arnedo, detallan desde la entidad aseguradora.

De momento, los peritos han comenzado a realizar las primeras visitas a las parcelas afectadas, por lo que Agroseguro pide a los agricultores que remitan los partes de siniestro tan pronto confirmen los daños en sus cosechas: «En los próximos días, una vez se reciban todos los partes de siniestro y hayan avanzado los trabajos de tasación de los daños, podremos realizar una estimación económica de los mismos, pero de momento es imposible».

En el campo

Mientras tanto la situación sigue muy complicada en el campo: «Si continúan las lluvias, como parece y vuelve el calor tendremos mildiu, oídio, botrytis..., y hasta las siete plagas de Egipto», explica el bodeguero Miguel Ángel de Gregorio (Finca Allende) que contabiliza daños importantes en 14 hectáreas de su viñedo en Briones, algunas parcelas incluso arrasadas y en las que ya trabaja para recuperar la madera para la próxima cosecha. «El daño fue el lunes, por la piedra; lo de ayer fue mucha agua y el problema es que llevamos varios días sin parar de llover». De Gregorio explica que «hicimos tratamientos antes de las tormentas que esperamos protejan, pero la preocupación principal ahora es entrar en los viñedos para volver a actuar de forma preventiva y con tanta agua no se puede». «Lo que más tememos -continúa- es que vuelva el calor».

Rafael Pérez González (Bodegas Vallemayor) tiene 70 hectáreas repartidas por todo el municipio de Fuenmayor, epicentro de las últimas tormentas: «El pueblo está muy mal y he visto incluso gente que no ha perdido sólo la cosecha, sino la viña; creo que ni los más viejos del lugar había visto algo así». En su caso, tiene al menos cuatro viñedos dañados por el granizo en los que ya está pensando en recuperarlos para la cosecha próxima: «Calculo que tendremos un 40% de producción perdida en total. Tenemos el viñedo repartido en varias zonas y hay mucha diferencia entre unas y otras».

Julián Palacios, ingeniero agrónomo (Viticultura Viva), muestra también su preocupación: «Trabajamos viñedos en la zona de Assa y nos tocó la primera gran tormenta, con 60 litros y granizo, y ahora han vuelto a caer cien litros en dos días...». «En Ollauri el mayor daño fue el lunes, por una fortísima granizada con intensidades muy altas, media y baja, en función de las parcelas, pero hay alguna en la que ya estamos trabajando para sacar madera para el año que viene».»La preocupación es que esto sigue, las previsiones de lluvia y tormentas continúan y, aunque hemos tenido una tregua con las temperaturas parece que volverá el calor, lo que supone mucho riesgo». Palacios trabaja también con viticultura ecológica lo que complica más las cosas: «Tanta lluvia deslava el cobre y el azufre que dimos de forma preventiva, así que sí estamos preocupados; tenemos 160 litros acumulados en Assa en poco más de una semana y 100 litros en tres días en Ollauri, una barbaridad y hay que preguntarse si estos fenómenos tan extremos son ya la tónica general de todos los años».

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