Florentino Martínez, con la cocina
La bodega de Cordovín apadrina a los grupos de la Escuela de Hostelería y Turismo
J.ALBO
Sábado, 20 de diciembre 2014, 01:31
El vino 'marida' con los proyectos emprendedores de la Escuela de Hostelería y Turismo. Bodegas Florentino Martínez apadrina a los cinco grupos de Dirección de Cocina (DC) del centro calceatense que participan en el proyecto 'Start Innova'. Guadalupe San Millán pertenece al grupo DC4, que plantea un punto de venta de comida tradicional por 'tupper', para llevar. Para esta alumna, la iniciativa «es muy novedosa y hace ver que a pesar de las circunstancias y de la crisis las oportunidades siguen y que debemos apostar por nuestros objetivos e intentar cumplirlos». Óscar Torres, miembro del grupo DC2, idea un autobús-restaurante con diferentes tipos de ofertas. «Hasta que no te pones a prueba a la hora de tomar decisiones y proyectar ideas, realmente no te das cuenta del potencial que tienes. Está muy bien para abrirte los ojos», dice de 'Start Innova'. El grupo DCI propone una carnicería-restaurante y el DC3 unas 'mangueras' para hacer canapés de forma instantánea. A la hora de escribir estas líneas, el quinto de los grupos estaba pendiente de concretar su proyecto.
START INNOVA
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Impulsan.
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Gobierno de La Rioja y UNIR.
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Padrinos.
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Grupo Pancorbo, Citroen Auto Iregua, JIG-Get App, Bodegas Dunviro, Fiora y Bodegas Florentino Martínez.
Rubén Fernández, tutor en el centro del proyecto, defiende la innovación que este propugna. «Cuanto más se sorprenda al cliente más fácil es sobrevivir y alcanzar el éxito», indica el profesor, que refiere que esta experiencia puede servirles a los alumnos para su proyecto de fin de ciclo. «Sobre todo lo que aporta es innovación, porque el proyecto de fin de curso lo hacen de una manera más realista y aquí pueden hacer lo que quieran; se pueden lanzar a la piscina que quieran», dice.
Luis Miguel Martínez, de Bodegas Florentino Martínez, sustenta su apadrinamiento en que «lo que nosotros mismos hemos hecho en la bodega ha sido gracias a la innovación, a la creación de nuevas líneas de comercio y de presentación de productos; unir siempre la cultura con cada vino especial que sacamos en la bodega, y qué mejor manera de hacerlo que a través del apoyo a un centro educativo que, como nosotros, también pretende innovar». El responsable de la bodega de Cordovín añade: «Al final, los futuros cocineros, los futuros emprendedores de la Hostelería en La Rioja pasan por la Escuela de Hostelería y apoyándoles también nos apoyamos a nosotros mismos y a nuestro entorno».