Los principales empresarios de Israel acusan a Netanyahu de llevar al país a una «recesión peligrosa y sin precedentes»
Los propietarios y directivos de las 200 compañías más importantes de la economía hebrea le censuran que esté dispuesto a asumir el aislamiento internacional y convertir el Estado en una autárquica «súper-Esparta»
M. Pérez
Martes, 16 de septiembre 2025, 13:03
El Foro Empresarial de Israel, la organización que representa a las 200 empresas más grandes del país, ha advertido al primer ministro, Benjamin Netanyahu, que ... su empeño de continuar la guerra en Gaza conduce al Estado hebreo a una «crisis económica y política peligrosa y sin precedentes». En una declaración contundente que coincide con el comienzo de la invasión terrestre de Gaza City, los empresarios exigen al jefe del Gobiero que detenga la guerra, haga los esfuerzos precisos para liberar a los rehenes en manos de Hamás y, a continuación, convoque elecciones generales. En definitiva, reclaman abrir la puerta a una nueva etapa política israelí.
El comunicado es una consecuencia directa de unos comentarios inauditos para el sector económico que Netanyahu realizó el lunes durante un discuso de su minitro de Finanzas. Reconoció que Israel se enfrenta al aislamiento internacional y llamó a convertir el Estado en una «Súper-Esparta» autosuficiente del resto del mundo. Un proyecto de país que hace solo unas semanas nadie se esperaba que fuera capaz de alentar.
Noticias relacionadas
El extraño discurso del primer ministro admitió la posibilidad de recibir sanciones económicas y sufrir embargos de armas por parte del Viejo Continente, sobre todo después de haber apalabrado una vez más el respaldo de Estados Unidos, según se desprende de la visita del secretario de Estado, Marco Rubio, a Jerusalén, que ha concluido este mismo martes. La mayoría de armamento y piezas militares que compran las Fuerzas de Defensa lo hacen a EE UU y su presidente, Donald Trump, ha amenazado con aplicar aranceles a quienes sancionen al Estado judío, lo que para el primer ministro supone un efecto tranquilizador frente a un bloqueo internacional. Francia, Italia, Países Bajos, España y el Reino Unido ya han impueto sanciones totales o parciales.
Ninguna autocrítica
Nada de guerra ni de civiles muertos, El jefe del Gobierno atribuyó el descrédito a la actuación de «minorías musulmanas» que han «doblegado» Europa y a una «agenda islamista extrema» que ha puesto en su contra a un número creciente de gobiernos. En otras palabras, se habría llegado a una «influencia muy negativa» respecto a Israel, en la que habrían intervenido incluso China y Qatar. El dirigente del Likud no aludió a la masacre de Gaza, su resistencia a firmar una tregua o el reciente bombardeo precisamente en Qatar contra la delegación negociadora de Hamás.
Esta es, en cualquier caso, la primera ocasión en la que Netanyahu admite la eventualidad de tales repercusiones. Ni siquiera cuando la ONU denunció la crisis humanitaria en Gaza o la Corte Penal Internacional le acusó de crímenes de guerra, el primer ministro acató el reconocimiento de cómo su estrategia pasará factura a los israelíes o demolerá su imagen global. Sin embargo, lo que más ha alarmado a los grandes empresarios es su resolución a seguir adelante y la demostración de una patente ausencia de reflexión.
Lejos de dar marcha atrás, Netanyahu dibuja un nuevo Estado hebreo en el que «vamos a ser Atenas y una súper Esparta combinadas». Incluso avanza planteamientos lindantes con una economáa de guerra al subrayar que Israel deberá desarrollar «nuestra industria armamentística». El primer ministro se mostro un defensor tradicional «del libre mercado», pero advirtió que «tendremos que mostrar algunos indicios de autarquía. No tenemos otra opción, al menos durante los próximos años en los que tendremos que enfrentar estos intentos de aislamiento»,
El foro respondió este miércoles de una forma tajante: «No somos Esparta. Esta visión, tal como se presenta, nos dificultará la supervivencia en un mundo global en evolución». «Nos dirigimos hacia un abismo político, económico y social que pondrá en peligro nuestra existencia en Israel», ha afirmado la asociación, que representa a la mayoría de los trabajadores del sector privado en el país.
El Foro Empresarial reúne a 200 directivos y propietarios de las principales empresas de Israel. Entre ellas hay decenas de compañías tecnológicas, farmacéuticas, aseguradoras, cinco entidades bancarias –como el Bank Mizrahi Tefahot y el First International Bank of Israel–, así como gigantes minoristas, consorcios hoteleros, la cadena de centros comerciales Big Shopping Centers o el Grupo Azrieli. La página web de este conglomerado dedicado al sector inmobiliario y de negocios comerciales está presidida, por cierto, por un calendario que cuenta los días, horas y minutos que permanecen presos los secuestrados por Hamás.
Caída de la bolsa
Las fuerzas vivas de la economía de Israel han arremetido contra Netanyahu con anterioridad. El 31 de marzo de 2024 dieron el día libre a los trabajadores de las empresas para acudir a una movilización contra la política de guerra y a favor de la liberación de los rehenes. El foro también ha mostrado su oposición a la reforma judicial del primer ministro.
Sin embargo, es la primera vez que pone pie en pared de esta manera. «La economía israelí muestra una resiliencia excepcional, a pesar de los desafíos políticos y de seguridad, pero no para siempre», alerta el foro. De hecho, la bolsa de valores se ha desplomado esta mañana cuando las tropas han entrado al asalto de Gaza City mientras solo unas horas antes Netanyahu proclamaba que «es la más fuerte del mundo».
El Gobierno «debe cambiar de rumbo de inmediato en beneficio de todos los ciudadanos israelíes», ha añadido la patronal hebrea. «Caminamos con confianza hacia un abismo político, económico y social que pondrá en peligro nuestra existencia en la Tierra de Israel. (El Gobierno) debe detenerlo».
Las grandes empresas se suman a una creciente oposición social a la estrategia gubernamental, que de momento hace escasa mella en un primer ministro aparentemente desatado y que cuenta con el salvavidas de los partidos ultras para seguir siendo el capitán de este dramática contienda. La calle le pide este martes que no siga con la operación, los militares volvieron a mostrarle este domingo su desacuerdo con la intervención en Gaza City durante una reunión del Consejo de Seguridad y la oposición política tacha de «locura» la aparente aceptación del jefe del Gobierno de que el país entra en una etapa de aislamiento.
«El aislamiento no es un destino; es el resultado de la política defectuosa y fracasada de Netanyahu», escribió en X el líder de la oposición parlamentaria, Yair Lapid. El exjefe de los ejércitos Gadi Eisenkot criticó igualmente al primer ministro y alertó de que: «no habrá una segunda oportunidad para reparar el daño causado por él y sus socios, abandonaron a los rehenes y aislaron a Israel en el mundo».
¿Tienes una suscripción? Inicia sesión