Trump despide a la jefa de Estadísticas Laborales porque no le gustan los malos datos de empleo en julio
Acusa a la funcionara de manipular las cifras desde la pasada campaña electoral en apoyo de la demócrata Kamala Harris
T. Nieva
Sábado, 2 de agosto 2025, 20:06
A Donald Trump no le gustan las malas noticias, sobre todo si cuestionan la eficacia de sus medidas. Por eso, el presidente de Estados Unidos ... ordenó despedir a la alta funcionaria a la que acusa de manipular las cifras del empleo, después de que los datos oficiales alertaran de una caída de las contrataciones. «Me acaban de informar de que las 'cifras de empleo' de nuestro país están siendo elaboradas por una persona designada por (el expresidente demócrata Joe) Biden, la doctora Erika McEntarfer, comisionada de estadísticas laborales, quien falsificó las cifras de empleo antes de las elecciones para intentar aumentar las posibilidades de victoria de Kamala Harris», difundió Trump en su plataforma Truth Social.
Su reacción ha sido inmediata. «He ordenado a mi equipo que despida a esta persona designada políticamente por Biden», dijo. «Cifras importantes como esta deben ser justas y precisas; no pueden manipularse con criterios políticos», justificó el presidente.
El viernes por la mañana, el informe mensual de empleo reflejó un panorama más sombrío de lo esperado sobre el estado del mercado laboral, en un momento en que los expertos pronostican una desaceleración debido a la ofensiva arancelaria de Trump.
«McEntarfer dijo que solo se crearon en julio 73.000 empleos (¡alucinante!), pero lo que es más importante es que cometieron un grave error al reducir en 258.000 el número de puestos de trabajo en los dos meses anteriores», aseguró el magnate. «Cosas similares sucedieron en la primera parte del año, siempre negativas. La economía está en auge», criticó en referencia al supuesto apoyo de McEntarfer a la candidata demócrata Kamala Harris en el anterior proceso electoral.
Aumenta el paro
Pese a la euforia que pretende difundir Trump, la tasa de desempleo aumentó ligeramente hasta el 4,2%, en comparación con el 4,1% de junio. Aun así, el Gobierno estadounidense sostiene que la economía está en crecimiento y quiere que la Reserva Federal (Fed), el banco central norteamericano, apoye aún más al Ejecutivo bajando las tasas.
Esta semana la Fed optó por mantener los tipos de interés sin cambios por quinta vez consecutiva, en clara oposición a Trump. Según los partidarios del presidente, un recorte de las tasas habría «protegido preventivamente» la economía y el mercado laboral.
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