Ver 37 fotos
La chapela tendrá que esperar
Peio Etxeberria logra el título del Cuatro y medio en una final en la que Javier Zabala se vio siempre a merced del navarro
Javier Zabala no pudo inscribir su nombre en el palmarés del Cuatro y medio al caer en la final disputada este domingo en el frontón ... Bizkaia ante Peio Etxeberria (22-11). Sin embargo, el Zabala que perdió no es el que conocíamos hasta ahora. El delantero logroñés ha roto un techo de cristal para la pelota riojana (volver a una final diez años después de que lo hiciera Untoria en el Parejas y dieciocho después de que Titín ganara el Cuatro y medio) y además ha demostrado al mundo de la pelota y, lo que es más importante, a él mismo, que se ha convertido en un pelotari total –capaz de ganar el Cuatro y medio, el Manomanista y el Parejas–.
El ambiente en el frontón Bizkaia no podía ser mejor. Subió diez grados la temperatura con la presentación de los protagonistas. Mucho seguidor de Zabala y mucho también de Peio Etxeberria. La ocasión lo merecía.
Apuraban el calentamiento los dos protagonistas mientras la pantalla gigante recordaba la famosa final del año 1997 entre Retegui II y Titín III (22-21), para muchos el mejor partido de la historia del Cuatro y medio.
La puesta en escena de Zabala fue muy buena. El partido transcurrió por los derroteros que se esperaba: dos pelotaris con un juego similar y muy potentes físicamente. Zabala salió templado y eso que la chapa le dio el saque a Etxeberria. Pero el riojano se plantó en el centro del frontón y movió a su rival para ir desgastándolo física y mentalmente (2-4).
Supo Etxeberria darle la vuelta al partido con la misma medicina que estaba recibiendo. Pasó a su versión más mandona, dándole mucha velocidad a la pelota ante un Zabala que no sabía cómo responder (8-4). Ahondó en la herida el delantero navarro con dos saque-remate inapelables (10-4). Aparecen los primeros gestos de Zabala de no estar cómodo.
Un dos paredes de Exteberria que los jueces cantaron mala le dio un respiro a Zabala. Aunque en el tanto siguiente, el más largo hasta el momento, ambos se castigaron físicamente y Peio termina de dos paredes. Zabala no corre, solo ve botar la pelota.
Se llegó al descanso televisivo con clara ventaja de Peio Etxeberria (12-5) y con la sensación de que Zabala no encontraba su lugar en el frontón. El riojano era un cuchillo romo, sin punta, sin colmillo, incapaz de hacerle daño a un rival que tanto a tanto se crecía viendo cómo su plan de partido salía a la perfección.
Volvió Javier Zabala padre a sentar a su hijo para intentar cortar la sangría. No había ni una ligera sombra del Zabala que venció en semifinales con mucha solvencia.
Peio Etxeberia, ya en modo campeón, firmó un gancho sensacional, atacando la pelota muy arriba, junto a la pared. Sensacional ejecución para acercar el partido al precipicio (16-6).
Zabala sufría en exceso, jugando siempre a bote y sin hacerse con el dominio del tanto. Un nuevo fallo de Etxeberria con un dos paredes demasiado largo le dio esperanzas al riojano. Con el saque ya pasó a dominar y cerró el siguiente tanto obligando a Peio en pared (16-7). Pero el navarro no quería sustos y pidió silla con su botillero Gaskue. La idea era cortar cualquier amago de reacción del delantero de La Rioja.
Para que la decoración cambiara había que intentar cosas diferentes y Zabala se tiró al saque de dos paredes y luego bajó la pelota desde lejos (16-9). ¿Resurgir?
Pero los golpes del riojano eran de seguridad, sin arriesgar y sin dar un paso adelante para jugar de aire. Etxeberria mandó el partido al segundo parón con un tanto de saque, el cuarto (18-9). Y regresó al partido con el quinto y el sexto, (20-9).
El siguiente también fue para el navarro aunque dominó Zabala, pero si no matas te matan, y Peio se jugó muy exigido un dos paredes con la zurda que le salió perfecto (21-10).
Zabala sumó su primer saque pero fue el canto del cisne antes de que Peio Etxeberria lograra la chapela en su tercera intentona (22-11). El navarro fue mejor, tuvo más claro lo que había que hacer y la habilidad para realizarlo sobre el frontón del Bizkaia.
¿Tienes una suscripción? Inicia sesión