«Si existiera un patrocinador, podría acogerse el Challenge»

- ¿Qué balance hace de estos cuatro días de competición?

- El balance es muy positivos. Estamos muy contentos de cómo se ha desarrollado todo.

- El Campo de Golf de Logroño se ha llevado muchos elogios...

- La verdad es que el campo ha llegado en unas condiciones que ni nosotros mismo pensábamos que podíamos llevarlo hasta ese límite.

- ¿Qué le han comentado los profesionales que participaron en el torneo?

- Jugadores que están acostumbrados a jugar el Circuito Europeo nos comparaban con los mejores campos de España, sobre todo por los greenes. Han llegado a estar a casi 12 pies de velocidad (es la unidad de medida de velocidad en los greenes) y los grandes campos del mundo llegan como mucho a trece.

- ¿Y cómo se consigue?

- Es muy difícil. No es solo cuestión de segar. Hay que meter otras máquinas y realizar unos trabajos previos para luego cortar durante la semana.

- Parece que los trabajadores del campo han trabajado muy bien.

– Hemos llevado a un pico de preparación el campo muy alta. Será difícil de conseguir. Para que te hagas una idea, los días de competición se cortan los greenes por la mañana, se les pasa el rulo, se rastrillan todos los bunkers, se siegan todos los tees... Y por la tarde, cuando ya no juega nadie, se hace otra siega y se vuelven a alisar los bunkers. Este nivel de mantenimiento lo tienen los grandes campos, los que tienen muchos recursos. Nosotros lo hemos suplido con un esfuerzo mayúsculo de todos los trabajadores del Campo de Golf de Logroño.

– Después de esta experiencia, ¿Logroño estaría capacitado para acoger una prueba del Challenge Tour (circuito para los profesionales que quieren acceder al European Tour)?

– Pasar de este evento que hemos organizado supone mucho más dinero. Si existiera un patrocinador potente que apostara por traer a Logroño una prueba del Challenge Tour, se tendría en cuenta. ¡Por soñar...!

– ¿Pero el campo estaría a la altura?

– Sí, claro. El campo con sus 18 hoyos podría albergar perfectamente una prueba mayor. Y la grandeza del campo permite instalar carpas más grandes, hay una zona de prácticas muy amplia... El campo sí está preparado.

– Esta prueba ha servido también para promocionar un deporte al que hay que quitar la etiqueta de elitista.

– Por un lado, el torneo ha servido para reconocer el gran esfuerzo de los patrocinadores. Por otro, para que la gente visitara el campo, viera la finca y conociera el golf de cerca.