El trofeo del Berceo viaja hasta el país nipón
El equipo japonés Tokushima Vortis se hace con la competición juvenil después de ganar al Valvanera en la tanda de penaltis
Homenaje de los grandes, con bollo preñado incluido, en el primer y último torneo que verá La Isla dentro de sus paredes. Si esta competición ... entre juveniles organizada por el Berceo ya era especial de por sí, al ser la más antigua del panorama nacional, aún lo fue más este año al marcar el cierre de una bonita etapa dentro de la instalación. Y es que los berceístas apuraron al máximo sus últimas horas en el recinto deportivo antes de su mudanza definitiva, albergando un torneo de talento juvenil nacional e internacional que movilizó a cientos de personas de la capital en las gradas.
Después de resolver la Mini Copa y el Torneo Juvenil Femenino el miércoles, llegó la hora de dirimir los ganadores de la competición. El Valvanera y el Tokushima Vortis de Japón no erraron en sus primeras eliminatorias al ganar al Berceo y a la Real Sociedad, respectivamente. Por ende, fueron estos dos últimos equipos lo que se vistieron de corto primero para seleccionar al tercer y cuarto clasificado de la edición número 51 del Torneo Ciudad de Logroño.
Los berceístas buscaban redimirse tras caer por la mínima ante su compañero riojano pero no pudieron sacar rédito a su favor como anfitrión, terminando como último clasificado de la competición. Lo que no implica que los logroñeses no luchasen hasta el final gozando de buenas ocasiones para poder eliminar a los realistas. Pero la garra donostiarra se impuso después de una primera media hora explosiva que permitió que los txuri-urdin se colocasen con una ventaja de dos goles en el marcador. El primero en estrenar puerta fue Hodei, en el minuto 19, para que Ilias ampliase la renta de su equipo a la media hora.
El Berceo intentó terminar cada una de las ocasiones que generaba en campo rival pero los donostiarras se convirtieron en un duro hueso de roer, sobre todo, defensivamente. El único que consiguió traspasar su muro fue Lucas Gil al aprovechar uno de los pocos errores de la zaga de la Real para driblar al meta vasco y hundir el esférico a puerta vacía el tramo final del partido. No fue suficiente, por lo que el Berceo abandonó La Isla a la cola del torneo.
Automáticamente, después comenzó la final entre Valvanera y el Tokushima Vortis. Esencia riojana contra la sorpresa japonesa. Los jóvenes del país nipón ya venían de ganar de manera holgada a la Real Sociedad en el partido del miércoles por lo que, estaba claro, que no se lo iban a poner fácil a los capitalinos. La posesión estaba del lado de unos visitantes que presionaban sin descanso en cada pérdida del balón. Su velocidad era imparable, sobre todo, en las bandas desde donde Muku intentó tocar diana con un lanzamiento que salió ajustado al palo.
El Valvanera aprovechó las ocasiones a balón parado para tantear los reflejos de un meta japonés que nada pudo hacer por frenar la volea de Martín que se hundió en la jaula al pasar sobre la cabeza de Raiya. Tocaba cerrarse atrás para levantar el trofeo del torneo. Y el Valvanera se esforzó al máximo por despejar los lanzamientos de los japoneses hasta que al inicio del segundo tiempo la pena máxima puso las tablas en el marcador después de que Neo transformase desde los once metros.
Fueron superiores los japoneses, al menos en número de llegadas, pero el Valvanera aguantó para llegar a los penaltis. Finalmente, Atsuto adivinó dos de los lanzamientos de los riojanos grabando el nombre del Tokushima Vortis en la historia del Torneo Ciudad de Logroño.
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