Uno a uno: línea demasiado constante

Salvo un balón que se le escapó, cumplió perfectamente tanto por arriba como por abajo. Además, el Leioa tampoco le puso a prueba con la exigencia que han hecho otros equipos.

Acabó el vitoriano con molestias en su pierna izquierda. Sosegado en la salida en corto y preciso en el balón en largo. Estuvo atento en las pocas ayudas que necesitó Iglesias.

Mejor que en Amorebieta. Se peleó con Ibrahima y Yurrebaso y salió victorioso, aunque en ocasiones protagonizó resbalones inoportunos. Dio salida al balón, si bien no pudo rematar en ninguna acción a balón parado.

Mejor en la primera mitad que en la segunda. Su alianza con Ñoño generó peligro por banda izquierda, pero tras el descanso estuvo más vigilado y no tuvo tanta alegría ni llegada.

Muy trabajador, recuperando balones, por alto y por bajo, pero sigue muy anclado a labores defensivas y en ocasiones da la sensación que su equipo le echa de menos más cerca del área rival.

Uno de sus partidos más flojos. No estuvo preciso con el balón en los pies ni en la circulación del mismo. Acusaba molestias a lo largo de la semana y quizá no jugó en plenitud de facultades.

De nuevo por banda derecha. Pudo marcar en la primera mitad llegando muy bien al segundo palo, pero Iturrioz lo impidió. Al jugar a pierna cambiada en ocasiones no da al equipo la profundidad requerida, aunque se asocia muy bien en el juego por dentro.

Muy activo en el primer tiempo, aunque inmerso en un fútbol discontinuo, pero su juego es así. Generó varias ocasiones de gol para sus compañeros y estrelló el balón en la madera. En el segundo se diluyó en los minutos que estuvo.

No pudo celebrar su treinta y dos cumpleaños con victoria o gol. Se movió bien, dio opciones a sus compañeros y marcó un gol legal que no subió al marcador. La fortuna le fue esquiva.

Se le ve más cómodo junto a una referencia más ofensiva como Ander Vitoria. Le gusta descolgarse para recibir y ayer lo hizo, pero luego le cuesta más llegar al área porque no tiene un jugador en ella con el que asociarse.

Sus mejores minutos con la camiseta de la UD Logroñés. Aportó movilidad y frescura, protagonizó una pena máxima muy clara, pero no señalada y pudo marcar en el tiempo añadido. Todo se quedó, sin embargo, en nada.

Salió en un momento en el que el Leioa era superior en la medular, aunque se mantuvo en la media punta. Pugna, llegada, pero sin un remate claro.

Un disparo desde dentro del área y poco más.

Bien en la primera mitad y bien en la segunda. Fue de los jugadores que más continuidad tuvo. Además, no sufrió en defensa como en compromisos anteriores.