Nueva final ante el Barakaldo

Y lo cierto es que las sensaciones en esta nueva fase son cada vez mejores y los resultados así lo reflejan. Los jarreros se estrenaban ante el Portugalete con un empate sin goles, pero su juego fue superior al de los vizcaínos. Y eso que llegaban de atravesar la pandemia prácticamente todos los jugadores y un paró de entrenamientos de más de diez días.

El premio llegaría en la siguiente jornada, solo unos días después, cuando ya en casa el Haro se impuso con firmeza al Leioa por dos goles a cero. En un encuentro en el que se sumó el buen hacer con la oportunidad, ya que en los primeros minutos de partido el conjunto rival perdió a un jugador y los jarreros se adelantaron en el marcador en una de las pocas ocasiones de la temporada.

El de esta tarde será otro partido complicado, como es de prever en un grupo en el que sólo se salvarán tres de ocho. Ocupando el puesto inmediatamente superior en la clasificación se encuentra el próximo rival, en una situación alcanzable, ya que únicamente les separan dos puntos (18 y 16 respectivamente).

Actualmente la tercera plaza está ocupada por el Izarra, que cuenta con cinco puntos más, por lo que será difícil, pero no imposible, acercarse a los puestos de salvación.

Los técnicos jarreros, Aitor Calle (que de nuevo tendrá que perderse el partido por sanción, a la espera de la valoración del recurso) y Keku Urzanqui, siguen apostando por la dinámica de estos últimos encuentros, y con esa idea se afronta la jornada de mañana en Lasesarre, como si de una final se tratase, explicaba ayer el club.

Según apuntó el preparador, «la confianza en el equipo sigue siendo máxima y la premisa fundamental es que no vamos a tirar la toalla, no nos vamos a rendir y vamos a seguir dando guerra hasta el final». Para este encuentro son bajas Alberto Morgado, Txomin Barcina y Borja García.