José Ignacio Martínez, Chete, deja el banquillo del Logroño
«Ha sido una maravilla. Me ha exigido sacrificios pero ha sido espectacular vivir estos años de balonmano de máximo nivel». Con estas palabras definía ayer José Ignacio Martínez, Chete, su puesto de segundo entrenador del Ciudad de Logroño.
Chete llegó al banquillo franjivino tras la marcha de Rubén Garabaya y desde entonces ha disfrutado de cuatro intensos años. Antes también trabajó en la cantera del Ciudad de Logroño.
La decisión de Chete viene motivada por la incompatibilidad con su trabajo. «El club necesita a alguien con plena disponibilidad y yo por mi trabajo no puedo. Lo paso mal cuando no puedo estar en los entrenamientos matinales o me pierdo algún viaje», resume. De momento, el club no tiene recambio para la función de segundo entrenador y en las próximas semanas habrá noticias al respecto.
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.