«Creo que el balonmano gusta más de lo que demuestra la grada del Palacio»

– Hace un balance positivo del año pese a que el recuerdo del aficionado quede en la no clasificación europea.

– Sí, bueno, está claro que los últimos cinco minutos del partido de la semifinal te lo empaña un poco todo, pero si pones en perspectiva la temporada, creo que ha sido bastante buena.

– Se empezó muy mal, con 11 jugadores nuevos y se enderezó el rumbo. Ahora mantendrá a una base importante del equipo y el camino ya está iniciado. ¿Es optimista?

– Lo que está claro es que hay menos trabajo, pero luego eso no significa que los resultados te vayan a acompañar. Los jugadores que llegan es un Juvenil –cuyo nombre no se ha hecho oficial–, un lateral del Tatabanya (Andrej Pergel) y otro chaval en el extremo derecho (Oriol Zarzuela). Hay que poner en perspectiva todo porque no se valora nada.

– ¿Con qué momentos se queda de la temporada que acabó?

– Con el final de primera vuelta, donde ganamos siete partidos seguidos para llegar a la Copa de España. Luego alcanzamos la final de la Copa ganando en semifinales al Bidasoa y en la final apretamos al Barça, algo que no es fácil. Después de todo lo que habíamos pasado al principio, creo que nos fuimos muy contentos y que fue el punto de más alegría de la temporada.

– ¿Y el más amargo? ¿Ese inicio o los últimos minutos de la semifinal de la Copa del Rey?

– El inicio de temporada. Creo que al final, cuando parece que no arrancas, es complicado, es muy difícil salir de ahí, de esas situaciones. Y al final conseguimos emerger. El ejemplo de entrar en esas dinámicas es Cuenca, que se metió en una muy negativa y le costó salir de allí.

– Me habla de Cuenca, donde se ganó en un esprint final encomiable, ganando también en Puente Genil y Torrelavega en un momento bastante crítico de la liga, lo que muestra el carácter del equipo.

– Cuando había que apretar para estar lo más arriba posible, el equipo lo volvió a hacer, con otras siete victorias seguidas. En esta liga tan igualada y tan competida, no es fácil. El tema fue que el Granollers no falló tampoco y estuvimos hasta el último momento luchando con ellos.

– Para que la afición entienda, por presupuesto, ¿dónde tendría que estar ubicado el Ciudad de Logroño?

– No sé los presupuestos que tienen los demás. Con respecto al coste de plantilla, creo que estaremos entre los 7 u 8 primeros.

– Me consta de jugadores que están en otros clubes a los que ha querido fichar y no ha podido por el dinero.

– Sí, esta temporada ha sido muy difícil competir económicamente con ellos. Pero bueno, antes a lo mejor era al revés. Quizás el aficionado o la prensa está acostumbrada a que el Logroño siempre está arriba y que casi siempre entre en Europa, pero la realidad es que hace ocho años que 'Naturhouse' no está y que tenemos que lidiar con otro tipo de presupuestos. Creo que lo que se hace con la gente joven que viene, que progresa, que nos ayuda a estar ahí lo más arriba posible, a lo mejor no se valora del todo.

– ¿El no estar en Europa condiciona el presupuesto del club o Europa significa un quebradero económico?

– Europa es un quebradero de cabeza para la directiva porque al final es muy cara. Y luego, a lo mejor, lo arrastras las siguientes temporadas.

– El presidente Ángel Rituerto dijo a principio de año que ya estaba cumpliendo sus años e invitaba a ver si alguien se animaba a relevarle. ¿Eso a usted, personalmente, le pone intranquilo? ¿Cómo lleva esa situación?

– Es cierto que Ángel, al final, ya tiene una edad y lleva muchísimos años en esto, desinteresadamente, con muchos quebraderos de cabeza y lógicamente la gente se acaba cansando. Lo que pasa que, también es cierto, hemos estado en la Copa del Rey juntos y lo veo con muchas ganas y con mucha ilusión. Pero sí es cierto que no va a estar toda la vida.

– ¿Hay gente interesada en seguir con el proyecto?

– Soy el entrenador del equipo, esas cosas se las debería preguntar a él.

– Hablemos del equipo del año que viene. Viene Andrej Pergel, un lateral húngaro joven y tirador para reemplazar a Palomino. ¿Cómo es este jugador?

– Es un jugador con mucha movilidad, que puede hacer un poco de todo. Puede jugar entre líneas, puede lanzar más o menos de atrás. Pero no defiende en el centro como Palomino, con lo que a lo mejor vamos a tener que reestructurar un poco la defensa. Jugadores que no defienden habitualmente en el centro quizás tengan que empezar a hacerlo como Zaya o Ángel Rivero. Y también hay que mirar otros sistemas defensivos, sobre todo cuando estemos en el cambio lejano. Pero creo que es un jugador que nos puede dar también rendimiento más o menos inmediato, aunque es muy joven (tiene 20 años). Me fío mucho también, además de los 'highlights', de Pedro Rodríguez (exjugador franjivino), que es su compañero. Y las referencias son buenas como jugador y como persona.

– ¿Oriol Zarzuela?

– Es un jugador muy rápido, muy espabilado en defensa en el exterior. Es muy peligroso en la primera o segunda oleada, y defensivamente está muy bien. Al final viene a complementar a David Cadarso, que este año ha metido muchísimos minutos

– ¿Puede ser que este año, sobre todo en el inicio donde no salían las cosas, tuvo que apelar a la practicidad en lugar del balonmano táctico del que siempre hace gala?

– Al final siempre intentas adaptar un poco a los jugadores que tienes a cada partido. Pero sí es cierto que nos pasa muchas veces, lo que pasa es que a lo mejor este año ha sido un poco más exagerado. Hasta que el jugador da el 'click' y la cosa cambia, la dinámica cambia. Pero es que también no nos olvidemos que en esta liga tan igualada puedes quedar octavo. Hay tanto equilibrio en todo, que perfectamente un año puedes quedar segundo, tercero, cuarto, o puedes quedar el décimo.

– Desde el covid, la afluencia de público ha bajado. ¿Cree que va a seguir esa progresión?

– No lo sé. También ha habido partidos donde ha habido un muy buen ambiente. Creo que el balonmano gusta más de lo que demuestra la grada del Palacio. Sí es cierto que desde el covid hemos tenido menos gente, no solo nosotros, sino el deporte en general. Pero, ¿qué se puede hacer para que vuelvan? El equipo, los chicos y el club deportivamente han seguido respondiendo. No sé exactamente cuál sería la tecla que habría que tocar para ver un Palacio como hace 10 años.

– Usted está aquí muy a gusto. Tiene contrato dos años más. Sus hijos son riojanos, su mujer se siente como en casa. Está en una zona de confort. ¿Le gustaría mirar a Europa?

– Logroño es zona de confort. Estés donde estés. Estés trabajando en balonmano o donde quiera. Para mí, es un paraíso. Logroño y La Rioja son un paraíso. Y lógicamente para mi familia también. En algún momento habrá que salir de la zona de confort. Ya lo estoy haciendo con la selección húngara, pero ahora mismo no pienso en nada más que en los próximos dos años.

– ¿Ha tenido ofertas?

– Ha habido interés de algún equipo, pero me lo quedo para mí.

– Acudirá a sus primeros Juegos con Hungría. ¿Cómo lo afronta? ¿Con qué perspectivas?

– Para todo deportista, uno de los sueños es poder ir a unos Juegos Olímpicos, donde solo acuden doce equipos.