Baloncesto

El Unibasket es equipo de Liga Challenge

Para conseguir este ascenso tuvo que sufrir y tirar de tablas para doblegar, en un gran último cuarto, a un correoso Maristas Coruña por 49-62, con una gran Elena Salcedo, que tiró de galones para serenar a las suyas en los momentos críticos y para marcar diferencias con sus 18 puntos.

Y eso que no comenzó fino el Unibasket, sobre todo en tareas ofensivas. Las riojanas tardaron casi cinco minutos en conseguir sus primeros puntos. Para ese entonces, el conjunto coruñés ya había sumado ocho y se sentía muy bien en pista, muy acompañado por la afición desplazada a Villagarcía de Arosa. Sin embargo, después de que Dani Rubio llamase a capítulo a las suyas, todo empezó a fluir. Ceci Aldecoa y Mónica Alonso se tranquilizaron y empezaron a conectar con Terrer y Flórez. Llorente les tomó el relevo y de su mano llegó la remontada, que se terminó de consumar al final del primer cuarto con un triple de Aldecoa (13-16).

En el segundo acto, el Bosonir era otro equipo muy diferente al de los primeros cinco minutos de partido: gozaba de la puntería que antes se le negaba, ganaba los duelos y se marchaba en el marcador (21-29) gracias a la muñeca de Flórez y Salcedo. Reaccionó tímidamente el conjunto marista antes del descanso para mantener a las suyas con vida (26-30), aprovechando algunos errores ofensivos de las chicas de Dani Rubio.

En el tercer cuarto, ambos conjuntos se repartieron errores y aciertos durante diez minutos cargados de tensión. Ninguno de los dos contendientes quería equivocarse. Dimitrijevic se hizo cargo de los ataques gallegos y Salcedo, junto a Aldecoa, Alonso y Llorente tiraron del carro riojano, que pese a comandar con rentas muy cortas el marcador no acababa de sentenciar (43-45).

Fue en el último acto cuando el Bosonit sacó su mejor repertorio. Con templanza y firmeza, golpeó primero gracias a Terrer y Mónica Alonso. Las pupilas de Dani Rubio dieron un paso al frente en defensa y anularon a las coruñesas, que poco a poco se iban apagando mientras el Unibasket aumentaba la diferencia (43-50).

Quiso meterse el Maristas otra vez en el partido con un triple de Amusan, pero el Unibasket jugaba en ese momento con muchísima seguridad y confianza. El equipo logroñés cometía muy pocos errores, mientras que el bloque gallego se precipitaba y lanzaba sus últimos manotazos para poder engancharse al partido.

Solicitó el Maristas un tiempo muerto, pero no surtió efecto. Los rebotes eran todos para el Bosonit, con una Terrer espectacular (13 rebotes). Ceci Aldecoa, con un triple, daba incluso más oxígeno al conjunto logroñés, que confió los minutos calientes a Elena Salcedo que junto con Alonso pusieron la guinda al pastel.

Quedaba todavía un minuto por jugarse, pero el banquillo del Unibasket era una fiesta, al igual que la grada, la misma compartido por una numerosa y ruidosa afición coruñesa. Se consumó el tiempo y el Bosonit fue una piña de alegría, celebrando junto a su equipo técnico un logro histórico para un club que se tuvo que hacer de las cenizas del Promete.

Ahora llegarán días de celebración y luego el club tendrá que sentarse con tranquilidad para diseñar la nueva temporada en el segundo escalafón del baloncesto nacional.