«No solo necesito hacer el Quijote como actor, lo necesito como persona»

Hace doce años regresó a Logroño para hacerse cargo de la tienda familiar, 'Lodosilla', un pequeño establecimiento tradicional en la calle Sagasta de producto típico de la tierra, de la Ribera, fresco y en conserva.

Pero nunca ha abandonado su carrera actoral. A través de Sapo Producciones y de colaboraciones con otras compañías locales ha seguido activo en la escena riojana. En 2016 estrenó 'La razón de la sinrazón' en el Festival de Teatro de Logroño y durante varias temporadas estuvo representando la misma pieza cada fin de semana en un local en Cabo Noval.

En 2020 estuvo a punto llevarla a Estados Unidos, becado por la Universidad de Colorado Spring, pero la pandemia truncó aquella oportunidad. No obstante, Lodosa no pierde la fe y actualmente la tiene depositada en la Compañía Nacional de Teatro Clásico.

Mientras, hoy vuelve a un escenario logroñés como quien sale a desfacer entuertos en algún lugar de La Mancha: «No solo necesito hacer el Quijote como actor –dice–, lo necesito como persona».