Sobre la pista del Circo Price

«Si hace unos años me hubieran dado a elegir un proyecto profesional hubiese elegido, sin dudarlo, diseñar, producir y dirigir unas navidades en el Price». Este sueño del bailarín y coreógrafo Carlos López Infante se acaba de hacer realidad. La empresa que capitanea junto a su hermana Anna, Perfordance, firma el espectáculo 'Gospel Circus', estrenado el pasado martes en el Circo Price de Madrid, donde permanecerá en cartel hasta el próximo 6 de enero.

El reto ha sido de altura, y no sólo por las acrobacias aéreas que se muestran en el espectáculo. «Circo Price es el gran proyecto anual del Ayuntamiento de Madrid y lo ganamos por concurso en marzo pasado; la verdad es que fue un sorpresón», reconoce a este diario el artista riojano.

Su innovadora propuesta se inspira en el 'Cuento de Navidad' de Charles Dickens y, de hecho, arranca con aires victorianos coincidiendo con los primeros balbuceos del circo moderno para luego recorrer el presente y adelantarse al futuro. «Partimos de un circo muy antiguo, casi desde sus orígenes; recorremos en el presente con danza vertical, proyecciones y números casi de rock acrobáticos, y luego vamos al futuro donde todo es luz, reciclaje y futurismo», explica.

Un viaje en el tiempo que el espectador hace de la mano de Tristán y Cometa, personajes interpretados por los clowns Víctor Ortiz 'Wilbur' y Carla Pulpón.

«Donde Dickens habla de avaricia, nosotros hablamos de tristeza y, sobre todo, de estrés. Nuestro Tristán tiene el alma infartada», reconoce López Infante. Y para infundir alegría a su corazón está Joy Corazón Alegre (Dani Reus), un espíritu que se expresa en pareados y se acompaña de su séquito de cantantes de góspel.

Precisamente, el góspel es el elemento más innovador de este montaje, género musical muy acorde con las navidades que marca el ritmo del espectáculo e incluso se impone en su título. Para ello, los hermanos López Infante cuentan, en directo, con el coro Gospel Factory y la propia banda del Price dirigida por Germán Díaz.

En cuanto a los números circenses que se suceden en 'Gospel Circus', hay desde contorsionismo, equilibrios, baile y malabarismos hasta danza vertical, cintas aéreas y patinaje extremo. Excepto dos o tres números, la mayoría son de factura española. Y es que, como subraya Carlos López, «en este proyecto nos empeñamos en recuperar al artista español y traerlo a casa».

Sobre el escenario del Circo Price desfilan estas navidades 33 artistas, a los que se suman otros tantos profesionales detrás del telón. Estarán en cartel hasta el próximo 6 de enero para ofrecer un total de 66 funciones, con días en los que «hacemos doblete e incluso tripletes».

El Circo Price es el único circo estable que existe en nuestro país y uno de los pocos de Europa. El Ayuntamiento de Madrid lo recuperó en el año 2007 para tal fin. Ubicado en el número 35 de la Ronda de Atocha, este circo dispone de personal técnico y de una dirección artística, encabezada por María Folguera, que se encarga de las propuestas y programaciones.

En esta ocasión, su espectáculo navideño ha corrido a cargo de la empresa Perfordance, liderada por los riojanos Anna y Carlos López Infante. Reconoce este último que «lo más complicado ha sido estar a la altura del proyecto».