«La mayor fuente del big data Será el metaverso»

– Desde que se empezó a principios del 2010 a hablar del big data (o datos masivos) como el nuevo oro, todo ha cambiado mucho. Como bien dices, no es algo nuevo y la mayoría de las empresas entiende que, si almacenan y analizan todos los datos relevantes para su negocio, pueden obtener grandes ventajas de ello. Desde el nacimiento de Bosonit, nos hemos volcado en ayudar a las empresas en mejorar su eficiencia y productividad usando tecnologías disruptivas.

– ¿Cuál es la mayor aplicación que tiene actualmente?

– Es difícil elegir sólo una. El big data se aplica a multitud de sectores: salud, aplicaciones financieras, marketing, seguridad Informática, educación, etc.

– ¿Y a futuro?

– La revolución ahora tiene que llegar a las administraciones públicas, donde todos nos beneficiaremos de su digitalización. Siguiendo esa línea, en Bosonit hemos desarrollado nuestra propia plataforma de distribución de big data, Graphenus. A partir de la información recopilada desde diferentes fuentes y almacenada de forma fiable, realiza analíticas complejas en tiempo real y permite también desarrollar modelos de inteligencia artificial.

– ¿Ha sido la pandemia un impulso para la recopilación de datos?

– En efecto, la pandemia alteró las dinámicas tradicionales de relación en la sociedad, y en corto tiempo impuso una transformación en los sistemas educativos y laborales alrededor del mundo. Se vieron las ventajas de la explotación de los datos.

– Si hablamos del mundo del lenguaje y la comunicación ¿qué aporta el big data?

– El 79% de estos datos están en formato texto, palabras, de ahí que el llamado Procesamiento del Lenguaje Natural (PLN), NLP por sus siglas en inglés, esté cogiendo tanta importancia y se perciba como elemento clave en la gestión de datos del futuro más cercano. Los modelos de big data e inteligencia artificial, permiten entrenar algoritmos que nos permitan traducir textos, autocorrección, buscar sus palabras clave, asistentes de voz...

– ¿En qué punto está el español respecto al inglés en ese sentido?

– Esos algoritmos tienen que aprender de textos para luego dar una respuesta. La mayoría de estos modelos de lenguaje han sido entrenados para el inglés. El castellano, a pesar de ser el segundo idioma más hablado del mundo, carece de grandes modelos lingüísticos entrenados con datos extensos y de alta calidad. Eso crea una brecha. El castellano, gramaticalmente, es muy diferente al inglés: morfología de las frases, negación doble, ausencia de sustantivo, variaciones de sintaxis... La creación de un algoritmo que recoja la complejidad del castellano, mejorará la calidad de los resultados y nos posicionará en el mundo digital. En Bosonit, compartimos el objetivo de Valle de la Lengua de contribuir, desde La Rioja, al despliegue del potencial del español como herramienta de desarrollo de nuestra región.

– ¿Y en la educación?

– Al no tener modelos de lengua en castellano, todas las soluciones que podríamos implementar para ayudar, como crear tutores virtuales, identificar nuevos temas para la enseñanza, medir el rendimiento de los alumnos de manera simplificada, etc. no darán buenos resultados. Por ello, Bosonit, como empresa nacida en la cuna del castellano, se está volcando para dar soluciones específicas en español.

– Se habla ya de robots que escriben libros

– En efecto, para que un robot escriba un libro, ha tenido que 'aprender' cómo se escriben los libros. Esa es la labor de la inteligencia artificial, intentar que las máquinas/ordenadores imiten la inteligencia humana para realizar tareas y que vayan mejorando continuamente con la información (datos) nuevos que van recopilando. Así, para que un robot escriba un libro, ha sido entrenado leyendo (procesando) con multitud de textos, de distintos temas. Por ejemplo, no es lo mismo una noticia de un periódico que un texto jurídico.

– ¿Qué veremos próximamente?

– Actualmente, la comunidad está volcada en proporcionar a las máquinas conocimientos de sentido común que hagan posible avanzar hacia el ambicioso objetivo de construir IA de tipo general. Esto puede parecer simple, pero no lo es. Si los modelos son entrenados con datos que tienen sesgos, como por ejemplo de género, que proceden tanto de la influencia social que traen consigo los datos con los que se alimentan los modelos, se obtendrán resultados con prejuicios.

– ¿Cuál es el mayor reto al que se enfrenta el big data en estos momentos?

– La mayor fuente de big data será el metaverso, ya que es un espacio digital expansivo, comunitario y en tiempo real en el que pueden tener presencia multitud de individuos o empresas para interactuar con los usuarios y crear negocios 'on line'. Esta experiencia multisensorial e inmersiva permitirá que la recogida de datos sea más amplia y transversal.

– Existe cierto miedo en la sociedad respecto a la cantidad de datos de los usuarios que se recopilan

– Asegurar la máxima protección de los datos es un elemento básico en cualquier proyecto big data, pues este tipo de irrupciones pueden producirse en cualquier entorno. Además, desde la Unión Europea se han fijado regulaciones claras que obligan a que la recopilación de datos de carácter personal cumplan una serie de requisitos, para aplicar unas medidas de seguridad concretas. Así se asegura obtener el consentimiento de los usuarios, cuidar la calidad del dato, y regular el acceso a los datos por terceros. Para Bosonit es fundamental cuidar los datos y gestionar adecuadamente su protección, posesión y anonimización para poder aplicar sobre ellos técnicas big data.