El paseo de los libros inolvidables

A comienzos de otoño, el Paseo del Espolón se convierte en la versión viva del cementerio de los libros olvidados descrito en 'La sombra del viento', una novela que ha cumplido ya veinte años. Luego llegaron 'El juego del ángel', 'El prisionero del cielo' y 'El laberinto de los espíritus' a completar una tetralogía que une calidad literaria y éxito editorial, lectores veteranos y nuevos lectores.

Carlos Ruiz Zafón, Almudena Grandes o Javier Marías son algunos de los escritores que vuelven a hacerse presentes a través de sus obras en la Feria del Libro Antiguo y de Ocasión de Logroño, que abrió sus puertas este viernes por la mañana y permanecerá hasta el 23 de octubre. Pero no se trata de un cita fúnebre, sino de una fiesta de esa cultura que se transmite de mano en mano a través de las páginas escritas.

La cuadragésimo primera edición de este evento ya clásico en la ciudad, organizado por la Asociación de Librerías de La Rioja, cuenta con casetas de dieciocho establecimientos del país, especialmente de Levante, y cuatro riojanas: Querubín, Al Tossal, Torres y Asilo del Libro (de Valencia), Dante, Bécquer y Por Siempre Jamás (de Alicante), Rosa Sardá (de Barcelona), Madrid Books (de Madrid), Eurolibro (de Bilbao), Lorca (de Alcorcón), Buendía (de Albacete), Cajón de Sastre (de Ponferrada), Hijazo, Ángeles Sancha y Green Book (de Logroño), y El Velo de Isis (de Ezcaray).

Se trata de una cita, como afirmó el presidente de la Asociación de Librerías de La Rioja, Antonio Domínguez, «muy esperada en estas fechas, de las que mejor resultado suele dar a los libreros y de las más antiguas, ya que se viene celebrando desde 1980, con un solo año de suspensión por la pandemia». Domínguez inauguró la feria oficialmente junto a la concejala Carmen Urquía; el presidente de la FER, Jaime García-Calzada; y la directora general de Reindustrialización, Innovación e Internacionalización del Gobierno de La Rioja, Nathalie Beaucourt.

En las casetas que se extienden paralelas a la calle Miguel Villanueva conviven libros de todas clases, para todos los gustos y bolsillos. Por ejemplo, en El Velo de Isis el lector puede hacerse por diez euros con tres pequeños ejemplares de Blur Ediciones: ilustración, fotografía, diseño, relatos o crónicas de viajes muy demandados por los jóvenes.

En cambio, en Eurolibro, de Bilbao, hay verdaderas obras de arte que pueden llegar a los 10.000 euros, como una edición facsímil de las Cantigas de Alfonso X el Sabio, o a los 15.000, como una lujoso reproducción del Códice Áureo, o una versión del Beato de San Millán, todas ellas de Testimonio Compañía Editorial. También hay valiosos originales de colecciones seriadas: como los Quijotes ilustrados por Eberhard Schlotter (con 160 aguafuertes), Louis Jou (con 500 xilografías) o Daniel Vierge (con 250 grabados).

Son algunas de las piezas que esperan en esta gran biblioteca ambulante al aire libre, tan parecida en muchos sentidos a la descrita por Zafón: '... En este lugar, los libros que ya nadie recuerda, los libros que se han perdido en el tiempo viven para siempre, esperando llegar algún día a las manos de un nuevo lector, de un nuevo espíritu'.

El Velo de Isis, librería de Ezcaray desde 2011, es una de las tres riojanas en la Feria de Logroño. Nadia Lafuente e Ivo Iglesias llevan haciendo ferias desde hace más de diez años. «La de Logroño es una de las buenas -dice Nadia-, con tradición y con bastante público». En su caseta hay todo tipo de libros a precios muy asequibles: infantil, juvenil, tema riojano, títulos descatalogados, buena literatura y pequeñas joyas, como las de la editorial Blur.

Eurolibro lleva veinta años en Bilbao, en la zona de Indautxu. José Antonio Valladares recorre las ferias del País Vasco, Pamplona, Madrid o Málaga durante todo el año, a la de Logroño no acudía desde hacía años. «Por que coincide con otras», explica. En su caseta hay piezas de coleccionista, tanto originales como facsímiles, que pueden llegar hasta los 15.000 euros, como la copia del Códice Aureo de la editorial Testimonio.