Dos estrellas en la misma mesa

Además de degustar un menú con estrella Michelin y cocina de fuego, todos ellos tuvieron la oportunidad de compartir sobremesa con el anfitrión del evento, el guitarrista Pablo Sainz-Villegas, quien les agradeció su presencia y el gesto solidario con Cuerdas en Común, asociación que tiene en La Rioja Festival su proyecto capital, además de otras acciones que se prolongan a lo largo del año como 'La serenata a tus valores' o el acercamiento de la música a los escolares.

Para abrir boca y entrar en contacto, los asistentes a la II Gala Benéfica La Rioja Festival disfrutaron de un cóctel de pie, en el que se sirvió, además del mencionado pañuelo de flores, mollete de corteza ibérica y tartar de chuleta con bogavante.

Una vez ya acomodados en sus mesas, la velada gastronómica se abrió con la 'Ceremonia del pan y mantequilla', para continuar con capelletto de guisante lágrima, tendones y caldo de jamón. Los platos fuertes se sustentaron en la lubina y el solomillo, y de postre, pannaccota de melocotón, jazmín y agua de coco. Todo ello maridado con vinos de Bodegas y viñedos Marqués de Vargas.

Un menú diseñado por el cocinero Miguel Caño conforme a la máxima que también refrenda La Rioja Festival: promover la excelencia de la región. La alta gastronomía sumó así una experiencia más al festival, alimentado por la música clásica pero también por el gesto solidario.