Prisión provisional sin fianza para el presunto asesino de Haro

La titular del juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 1 de Haro ha acordado la prisión provisional comunicada sin fianza para el presunto autor del asesinato machista cometido el pasado viernes en la ciudad jarrera.

El hombre había pasado a primera hora de esta mañana a disposición judicial y tras declarar durante varias horas la juez ha acordado su envío al centro petenciario. El acusado estaba citado a las 09.00 horas y fue trasladado en ambulancia, custodiado por vehículos de Guardia Civil. El presunto asesino llevaba en el calabozo de la Jefatura de la Policía Local de Haro desde el mismo viernes en el que se produjo la detención.

Los hechos se produjeron pasadas las 18.00 horas del viernes cuando los vecinos escucharon gritos en el inmueble número 7 de la calle Siervas de Jesús, situada junto a la concurrida Plaza de la Paz, detrás del Ayuntamiento. Un testigo relató que había visto a una mujer gritando en la calle. Era la hermana de la víctima, que fue quien encontró el cadáver.

La pareja, de habla portuguesa, según indicaron algunos vecinos, llevaba menos de un mes viviendo en el edificio junto a dos niños, que también se encontraban allí cuando sucedieron los hechos.

El presunto asesino saltó desde el balcón de su vivienda a otro aledaño, y desde allí a la calle, según relataron los testigos. Uno de ellos llamó a Policía Local, cuya jefatura se encuentra a unos quinientos metros de allí, y los agentes le solicitaron que siguiese al hombre mientras ponían en marcha el dispositivo. El presunto asesino corrió entonces hacia el mirador de El Pardo, desde donde descendió a las vías del tren. Enseguida se personaron en el lugar los municipales, pero se perdió la pista del sospechoso, por lo que durante más de una hora agentes de la Guardia Civil y de Policía Local de forma conjunta rastrearon ambas márgenes. Finalmente, la colaboración de testigos y efectivos de ambos cuerpos permitió detener al varón en El Ferial.

En el entorno de la vivienda comenzaron a arremolinarse vecinos al ver el despliegue policial y la unidad de desde las 18.30 horas. Una hora después llegó la Policía Científica, que fue desarrollando su labor mientras en la calle un fuerte aguacero dispersaba a muchos curiosos.

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