Garrido es expulsada del pleno sobre el hospital de Calahorra y estudia «acciones legales»
Arceiz justifica la expulsión por «hablar en voz alta increpando» y le acusa de «molestar constantemente»
Las reiteradas llamadas al orden de la alcaldesa de Calahorra, Mónica Arceiz, a la portavoz del PSOE, Elisa Garrido («injustificadas», según la socialista) acabaron este ... martes con su expulsión durante el pleno extraordinario convocado para la defensa del Hospital de Calahorra tras la reducción del personal de Enfermería en las plantas y la eliminación de los mandos intermedios. «Por hablar en voz alta increpando cuando está hablando un portavoz de otro grupo (Óscar Moreno)», le recriminó la regidora cuando Garrido se defendió al sostener que «no he incumplido el reglamento del pleno», ya que «solo he hecho un comentario a mi compañero (Esteban Martínez)». «¿Tengo que llamar a la Policía?», llegó a decir Arceiz ante la insistencia de Garrido, que interpeló a la secretaria municipal sobre los motivos de la expulsión en el pleno. Momentos después la alcaldesa suspendía la sesión y los concejales del PP abandonaban en bloque el salón, al que no volvieron hasta que Garrido dejó su asiento.
Garrido acataba la orden y dejaba así la mesa de plenos (negando «haber increpado a nadie») pero no la sala, ya que decidió quedarse entre el público donde se encontraban los diputados del PSOE en el Parlamento de La Rioja, María Somalo y Miguel González de Legarra. Tras el pleno Garrido denunciaba en declaraciones a este medio que Arceiz «está empecinada en expulsar a los concejales del PSOE» y recordó que «al principio de la legislatura nos amenazó con expulsarnos a todo el grupo, después expulsó al señor Garrido incumpliendo el reglamento, y luego cambio de día los plenos impidiendo que yo asistiera hasta que los tribunales le dijeron que era inconstitucional». «Es una dictadora», afeó a la regidora para acusarle además de no ser imparcial en la dirección del pleno. «Hoy mismo ha habido concejales que han interrumpido, ha habido concejales que han llamado la atención a otros y no les ha dicho ni palabra», apuntó Garrido, que avanzó que «estudiaremos la opción de tomar acciones legales».
Mónica Arceiz por su parte remarcó que «es una actitud reiterada de esta concejala molestar constantemente cuando otros compañeros que no son de su grupo están interviniendo». «Se repite en todos los plenos y cada vez eleva más el tono de voz y es más molesta», aseguró la alcaldesa, que incluso sostiene que «es una voz que se escucha desde el público». La ausencia de Garrido en la bancada del PSOE se sumaba a la de los concejales de Vox, Maite Arnedo y Manolo de Reyes, quienes ya habían anunciado que no acudirían al pleno al considerar que el único fin de los socialistas era «propagandístico», puesto que en enero se aprobó por unanimidad una moción de IU de apoyo al hospital.
El PP tumba la petición de dimisiones en Salud
El pleno extraordinario convocado a instancia del PSOE para la defensa del Hospital de Calahorra estaba conformado por tres puntos: mantener el número de camas, personal y servicios; solicitar las dimisiones de la Consejera de Salud, del portavoz del Gobierno y del gerente del Seris «por su gestión y por mentir»; y que se sigan realizando las operaciones quirúrgicas «en lugar de derivarlas a centros privados». La aritmética del pleno, con la portavoz del PSOE expulsada y los concejales de Vox ausentes, dio al PP la mayoría de votos suficientes para tumbar los dos últimos puntos, que sí contaron con el apoyo de PSOE e IU.
«No nos van a callar. Ni a nosotros ni a la señora Garrido», dijo el edil socialista, Esteban Garrido, al rechazarse el segundo punto y después de que el primero saliese adelante tras acordar una enmienda de sustitución presentada por Izquierda Unida. En la misma este partido proponía sustituir el texto de este punto por la moción que se aprobó por «unanimidad» en el pleno de enero y en la que se recogía instar a Salud a que «mantenga la plena capacidad del hospital» sin «reducción de camas ni de personal».
Pero antes de su aprobación, el portavoz de Izquierda Unida, Óscar Moreno, aprovechaba para reprochar al PSOE haber pedido la convocatoria de un pleno extraordinario de «cosmética, de publicidad y propaganda» cuando «lo que aprobamos está aprobado en enero». «El problema viene de que fue una moción de IU y no del Partido Socialista», afirmó Moreno, que a su vez defendió que en vez de tratarse en un pleno extraordinario «podía haber venido en una moción en el pleno ordinario».
Concentración del personal
Por otro lado, los trabajadores del Hospital de Calahorra, convocados por CC OO, protagonizaron ayer una cuarta concentración para denunciar «recortes» de personal y el que no se cubran plazas vacantes en distintas especialidades médicas, algunas por jubilaciones, renuncias o traslados al Hospital San Pedro.
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