Zapatero apuesta por la desalación y descarta el trasvase del Segre como solución para paliar la sequía en Barcelona

El Gobierno sigue firme en su «no» al trasvase del Segre. La captación de aguas de este afluente del Ebro «no es la solución» que necesita Barcelona para paliar la falta de agua que arrastra de lejos y agravada ahora por la sequía. Hay otras alternativas «mejores, más útiles, más rápidas y más acordes» a la sostenibilidad hídrica y ésas serán las que se lleven a la práctica, aseguró ayer José Luis Rodríguez Zapatero, quien negó que exista «guerra del agua». «Se trabaja codo con codo» con la Generalitat para paliar la «peor situación» hídrica de Barcelona en los «últimos sesenta años», recalcó.

La postura la ratificó la ministra de Medio Ambiente. Cristina Narbona, apostó por la desalación de agua marina como el mejor remedio a largo plazo para garantizar los suministros en las zonas costeras más dañadas por la sequía. «Es -dijo- la única técnica que «garantiza el agua llueva o no llueva». Mientras que el presidente del PP, Mariano Rajoy, calificó ayer de «disparate» y de «esperpento valleinclanesco» la actuación del Gobierno ante el problema del agua en España, donde, a su juicio, se está cometiendo «una injusticia» con millones de españoles por este asunto. El líder del PP ha subrayó que lo que está pasando con el agua en España, y, en concreto, en Aragón, la Comunidad Valenciana, Murcia, Andalucía y ahora Barcelona, es que se está poniendo en juego el bienestar de los ciudadanos.

Por su parte, Renfe aseguró ayer que ve «viable» operar al menos un tren al día con un millón de litros de agua entre Tarragona y Barcelona en unos tres meses, según explicó ayer el director general de Mercancías y Logística de Renfe, Juan Fernández, quien aseguró que «hace algunos días» la Generalitat se puso en contacto con ellos para plantear esta posibilidad que, según el directivo de Renfe, «es viable» aunque la empresa está estudiando en qué condiciones.

Vagones cisterna

En concreto, explicó que cada uno de los trenes debería estar equipado con vagones cisterna o con instalaciones más pequeñas en contenedores. En este sentido, señaló que actualmente Renfe no realiza ningún transporte concreto de agua, por lo que debería aprovechar equipamientos que hasta ahora utiliza para el transporte de alimentos y leche, así como vagones de otras compañías que sí realizan este servicio. En principio, Renfe estudia la posibilidad de operar un tren diario.