Diego Urdiales | Torero

«Me siento muy feliz por haber vivido una tarde así. Estoy deseando volver»

– Ha abierto la puerta grande de La Ribera. Eso es empezar con buen pie.

– Me siento muy feliz por haber vivido una tarde así de bonita otra vez en mi tierra. Hubo momentos buenos y pude disfrutar de la tarde. Estoy desando volver.

– Es el único torero que hace doblete en Logroño, ¿qué supone verse dos días anunciado?

– Es un orgullo y una responsabilidad muy grande. Me preocupa estar a la altura de las circunstancias, sobre todo por la ilusión con la que va la gente a la plaza y que se vaya más ilusionada todavía.

– Cuando le hablan de Logroño, ¿qué es lo primero que piensa?

– Es una sensación especial porque cuando uno torea en su tierra se siente algo muy diferente al resto de plazas. Siento la responsabilidad máxima como la que pueda tener en cualquier plaza grande y esa cosa de torear en tu tierra con tu gente es algo que no puedo explicar con palabras pero que sí que lo noto en el cuerpo.

– Lleva una temporada en la que está sorteando tardes complicadas.

– La suerte es fundamental y hay tardes en la que los toros no ayudan pero lo importante son las sensaciones. Ha habido toros que me han permitido expresarme y he sentido cosas maravillosas. Hay temporadas que se ponen complicadas por rachas e indudablemente uno que se siente artista y tiene que expresar eso que lleva dentro se angustia por no poder hacerlo. No cabe duda que te inquieta, pero afortunadamente cuando los toros han colaborado ha habido cosas muy importantes y las he disfrutado mucho.

– ¿En qué momento diría que se encuentra?

– Estoy en un momento bueno, que es lo típico que se suele decir pero lo he podido demostrar últimamente. Busco que cada detalle y cada momento sean más importantes. Eso es lo que persigo y afortunadamente lo he podido demostrar últimamente delante del toro.

– ¿Cómo vive un día cuando torea en Logroño?

– Son días de muchísima responsabilidad. La gente paga una entrada, el esfuerzo que hace y el que vaya con esa ilusión tan tremenda a la plaza el poder estar a la altura a uno le inquieta. Intento estar lo más tranquilo dentro de lo posible, que ese día el cuerpo tenga esas sensaciones especiales porque no todos los días uno las tiene y desear que envista la corrida para que tanto yo como mis compañeros podamos tener una tarde importante porque eso es bueno para Logroño, para el toreo y para vivirlo.

– ¿Se da algún paseo o según el día?

– En Logroño suelo estar con mi amigo Sergio Eguizábal y lo que nos apetezca en ese momento. Hay veces que me apetece más mover el cuerpo y otras me apetece estar más tranquilo. Él es un ser especial y no todo el mundo en ese momento sabe estar. Es la persona ideal para hacerlo. Me trasmite tranquilidad y confianza. Me conoce, somos muy buenos amigos.