El PP gobierna desde los ayuntamientos a casi el 90% de los riojanos

El vuelco se produce no tanto en el reparto del número de ayuntamientos entre las dos principales fuerzas políticas, sino en el tamaño de los mismos. En este sentido, el PP ya obtuvo hace cuatro años 103 alcaldías, casi el doble de las que tenía el PSOE (54), pero entonces este último era el partido claramente dominante. Ahora, los populares suman seis ayuntamientos más, mientras que los socialistas pierden ocho, a la espera de lo que suceda en San Asensio, donde el recurso presentado por los socialistas ante la Junta Electoral Central obligó a aplazar hasta el 7 de julio la elección de alcalde.

Pero lo más trascendente es que el cambio de color político se ha producido en las localidades más importantes de la región, comenzando por Logroño –con casi la mitad de población riojana–, donde el color azul del PP ha conseguido la mayoría absoluta, y siguiendo por casi todas las cabeceras de comarca y las poblaciones del cinturón metropolitano. De hecho, el PSOE únicamente repite gobierno en Arnedo entre las principales localidades –finalmente con un pacto con los regionalistas de PR+E– y, a última hora, sumó también Albelda (3.591 habitantes) gracias a un acuerdo con Por La Rioja. En el resto de poblaciones de más de mil habitantes, los socialistas gobernarán únicamente en Aldeanueva –con el incombustible Ángel Fernández–, Casalarreina –ídem para Félix Caperos–, Murillo y Ribafrecha. Así las cosas, la población gobernada por PSOE pasa de 237.978 riojanos, el 75,3% del total en 2019, a 33.602, el 10,5% en la actualidad.

En cuanto a los partidos minoritarios, Vox irrumpió con fuerza en el Parlamento regional (dos escaños) y en los Ayuntamientos de Logroño, Calahorra y Lardero (con dos concejales en cada uno), pero no ha sido decisivo, ya que en los tres municipios el PP ha obtenido mayorías suficientes. El partido de extrema derecha logró 10 concejales en la región (frente a uno en las municipales de 2019), pero tampoco ha llegado a acuerdo alguno de investidura en ningún municipio, con lo que Feijóo puede dormir tranquilo respecto a La Rioja ante la próxima cita con las urnas para las generales.

Una situación casi opuesta es la de Por La Rioja, el partido que encabeza el exdirigente del PP Alberto Bretón y que en la noche electoral del pasado 28 de mayo se quedó fuera de las grandes 'plazas' –comenzando por el Parlamento y siguiendo por los ayuntamientos de Logroño, Calahorra y varias de las cabeceras de comarca–, aunque obtuvo la nada desdeñable cifra de 52 concejales.

Por La Rioja ha conseguido cinco pequeñas alcaldías (Sotés, Santa Engracia, Laguna, Pazuengos y Hormilla) y ha sido determinante a la hora de entregar mediante acuerdos los gobiernos municipales de Santo Domingo, al PP, y de Albelda, en este caso al PSOE y después de 36 años de mandatos populares.

Un caso especial es el de Cirueña, donde gracias a una jugada del partido de Alberto Bretón, aunque 'oficialmente' gobierna el PP, en la práctica lo harán realmente los regionalistas con dos de sus concejales y con el segundo de la lista de los populares, Rodolfo Egaña, quien a última hora rompió la disciplina de su partido y se votó a sí mismo para desbancar al que era su compañero de lista popular, Jorge Vergara, y quien se presumía que iba a ser el alcalde justo hasta el momento de la votación.

El PR+ España Vaciada, por su parte, retiene dos pequeñas alcadías (Nieva de Cameros y Viniegra de Abajo), aunque también saca partido parcial a los 16 concejales obtenidos. En este sentido, los regionalistas han alcanzado un acuerdo de gobierno con Javier García (PSOE) en Arnedo, aunque podían haber sido decisivos también en Nájera o en Villamediana, pero en ambos casos el PP ha decidido gobernar con mayoría simple.

Vinea, que no ganó en ningún municipio pero consiguió cuatro concejales, los rentabiliza notablemente al alcanzar un acuerdo para la gobernabilidad en Cervera y otro en Haro, en ambos casos con el PP. Lo mismo hace Ciudadanos, que, con su único concejal (25 tuvo en 2019), se integra en el pacto de la ciudad jarrera con los populares y con Vinea. Quienes aumentan también su peso colectivo son las agrupaciones de independientes, fórmula que se impone en diez ayuntamientos de la región, frente a los seis que hubo en 2019. En cuanto a IU, retiene la alcaldía de Berceo –con en una lista conjunta con el PSOE pero con su candidato, que repite además como alcalde–, pero pierde Camprovín, mientras que su concejal de Arnedo, que estaba en disposición de alcanzar un pacto con el alcalde socialista, desechó finalmente dicha opción por discrepancias y trabajará desde la oposición.