6.350 trabajadores riojanos no acuden a su puesto cada día por estar de baja médica

Esos datos fríos, apuntan los sindicatos, demandan matices. Sin conflicto en lo que se refiere a las bajas por IT (enfermedad común o accidente no laboral, enfermedad profesional o accidente de trabajo y períodos de observación por enfermedad profesional), inciden en que es preciso aclarar lo que Randstad Research tilda de absentismo injustificado, un cajón de sastre en el que los secretarios generales tanto de UGT como de CCOO en La Rioja aseguran que se incluyen muchas realidades que cuentan con base legal justificativa de la ausencia: desde vacaciones hasta días libres en compensación por horas extras, por ingreso o fallecimiento de un familiar directo o jornadas de asuntos propios recogidas en los convenios, entre otras alternativas.

El estudio de la firma de recursos humanos –que no especifica qué situaciones entran en esa categoría de absentismo no justificado– calcula que en el último trimestre del año pasado la tasa de absentismo en La Rioja fue del 5,7%, dato que pese a haber crecido medio punto en relación al trimestre inmediatamente anterior (julio-septiembre del 2021), es inferior a la media estatal (5,9%). El informe desagrega el dato global de la región y atribuye el 4,5% a las bajas por IT y el 1,2% restante al resto de causas.

«Entendemos que los datos son adecuados, ajustados a la realidad del mercado laboral», concede Jesús Izquierdo (UGT) antes de introducir los asteriscos: «El absentismo es una falta injustificada, no las ausencias que sí están justificadas por los motivos que sean», recalca asegurando que el 1,2% que se atribuye a ese presunto absentismo voluntario contaría con base suficiente bien «a través de un permiso retribuido, uno sindical, entre otras causas. El preocupante es el injustificado, algo de lo que el informe no habla».

En la misma línea, Jorge Ruano (CCOO), defiende la necesidad de definir de manera clara el concepto de absentismo ya que, cree, se acaba por criminalizar a trabajadores por el mero hecho de hacer uso de sus derechos laborales. «Cuando hay bajas por incapacidad temporal no podemos decir que es un problema laboral grave, podremos decir que hay un problema de salud laboral y habrá que analizar el porqué enferman las personas. En relación al resto de ausencias se incluye a trabajadores de vacaciones, con permisos, con citas médicas... Es una barbaridad, es un enfoque erróneo. ¿Cómo puedes calificar eso de absentismo? Nos enfada que se asocie al ejercicio de los derechos del trabajador», dice Ruano.

En el escenario nacional, La Rioja se configura como una excepción en la zona norte del país, en la que, junto a la Región de Murcia, se concentran los principales porcentajes de absentismo del Estado español. Para Randstad Research, el mayor volumen de absentismo (independientemente de si es por baja médica o por otras causas) se registró en el País Vasco (7,9%) y Navarra (7%) –las dos regiones con mayores niveles de absentismo por incapacidad temporal– además de Asturias y Murcia (6,6%), Galicia (6,5%) y Cantabria (6,4%). Mejores datos que La Rioja sólo presentan Madrid (5%), Comunidad Valenciana (5,3%), Extremadura (5,4%), Baleares (5,5%) y Andalucía (5,6%).

Esas diferencias entre el norte y el sur, argumenta Izquierdo, no hay que buscarlas tanto en una mayor o menor siniestralidad, como «en las condiciones laborales de los convenios colectivos. Los de norte tienen mejores coberturas. También se puede encontrar una explicación» en la diferencia de la tasa de desempleo de ambas zonas. «Cuando hay mucha temporalidad, lo que sucede es que no se cogen bajas y muchas personas que no están en condiciones para trabajar o medio convalecientes, no la tramitan porque tienen un trabajo precario y miedo a perderlo», añade desde CCOO Jorge Ruano.

Por áreas de actividad, según Randstad, la industria riojana es la que mayor nivel de absentismo registra (el mismo dato que la media nacional, el 6,1%), mientras que en Construcción es del 4% (frente al 4,5% nacional) y en Servicios del 5,7% (el 6% en España). Ruano retoma el argumento de la calidad laboral al analizar el dato de la industria: «Es el sector con mejores condiciones y los trabajadores ejercen sus derechos a vacaciones, permisos, etc., en tiempo y forma».

El informe sostiene que en todo el país son cerca de 1,2 millones de personas las que no acuden a su puesto de trabajo cada día. Exactamente, 1.186.875 profesionales, de los cuales el 25% (297.053) lo hicieron cuando no contaban con una baja médica (tampoco entra a valorar Randstad las circunstancias concretas que pudieron motivar esa ausencia), mientras que el 75% restante (889.822) se ausentaron por una incapacidad temporal justificada. «El absentismo laboral, la ausencia del trabajador de su puesto cuando estaba prevista su presencia, se configura como un problema grave para las empresas españolas, con un impacto directo sobre la productividad y los costes empresariales, lastrando asimismo su competitividad», argumenta el informe de la empresa, que sostiene que los datos correspondientes al cuarto trimestre de 2021 «ponen de manifiesto que en España el nivel de absentismo ha provocado la pérdida de un 5,9% de las horas pactadas, aumentando en cuatro décimas en relación al trimestre anterior».

«Nos gustaría que el informe desglosara ese absentismo, pero no habla de los motivos por los que el trabajador se ausenta. En todo caso, las explicaciones no hay que buscarlas tanto en esas bajas por IT o en la siniestralidad o falta de prevención sino, sobre todo, en las condiciones de trabajo», completa Izquierdo.