Ilurce abre la vendimia 2025 en Alfaro
Vino de Rioja ·
La bodega decide adelantar la recogida de su tempranillo blanco por el apretón del calor y confirma sospechas: muy, muy, poca uva«Hemos adelantado las previsiones por el calor que, además, parece que va a seguir apretando en los mismos términos durante unos cuantos días más», ... explica Víctor Escudero, joven enólogo de Bodegas Ilurce (Alfaro). «El viernes pasado hicimos un muestreo y nos llevamos una sorpresa porque nos encontramos con 11,9º baumé y con un pH y una acidez ya muy buena en el tempranillo blanco», detalla. «Viene el puente festivo, así que el lunes pasado volvimos al viñedo y en apenas tres días habíamos ganado entre 1 y 1,5º de alcohol probable, por lo que decidimos que teníamos que empezar hoy miércoles [por ayer]».
Bodegas y Viñedos Ilurce cultiva algo más de dos hectáreas de tempranillo blanco, la variedad más temprana en la zona, con la que Víctor Escudero lleva un par de cosechas trabajando un monovarietal que ha tenido muy buena aceptación en los mercados: «La clave es la frescura y la acidez porque la tempranillo es una variedad que, si se te va un poco, se resiente la acidez y a nosotros nos gustan los blancos con 'chispa'».
La vendimia, eso sí, parece confirmar las temidas sospechas: «Tuvimos mildiu en las dos parcelas, una en la parte más alta del pueblo y otra en la baja, y la verdad es que el rendimiento que hemos sacado es un 'desastre', aunque la uva tiene muy buen pinta», indica el viticultor. «El racimo y las bayas no pesan. A pesar de que tenemos goteo en esas parcelas que plantó mi padre y les dimos unos litros el fin de semana para soportar las altísimas temperaturas, nos hemos encontrado con unos 8.000 kilos de uva, cuando tendríamos 'papel' para unos 21.500». «Es decir –continúa–, la merma es todavía mayor sobre lo que cogimos en estos dos viñedos el año pasado, cuando ya fue una cosecha muy escasa».
En este sentido, Escudero confía en que estas cantidades no sean un reflejo para el resto de la vendimia en el caso de los tintos, pero «me temo que no vamos a ir demasiado desencaminados». El joven viticultor explica que la garnacha, la variedad, con la que más trabaja la bodega familiar de Alfaro –junto con un importante aporte de graciano–, «tampoco ligó bien en floración en nuestra zona, con lo que va a haber poca uva y, con 600 litros acumulados, hemos tenido muchos ataques de mildiu en los tempranillos».
De momento, Ilurce parará la vendimia hasta que pueda cortar los primeros racimos de tempranillo tinto: «Vamos a seguir muestreando y viendo cómo actuar en función de cada parcela, pero sospecho que con estos calores quizás dentro del mes de agosto haya que cortar al menos algunos racimos».
Sin retraso
Escudero confirma que «el calor se ha 'comido' en su zona el retraso de alrededor de ocho días en que se estimaba que había en la maduración respecto a la campaña anterior: «Quizás no tanto en la garnacha, porque con tanto calor la planta cierra estomas para protegerse de la deshidratación, pero sí en el caso del tempranillo». «La verdad –continúa– es que no sé qué es lo qué va a pasar este año con las fechas, porque si viene tan poca uva y con tan poco peso, vamos a tener una cosecha muy, pero que muy, corta y, probablemente, rápida».
El Consejo Regulador, en el pleno del pasado 31 de julio, rebajó los rendimientos de producción de forma generalizada para toda La Rioja Oriental. En el caso de Alfaro, aunque únicamente para las variedades tintas, se redujo el potencial máximo amparable de 5.850 kilos por hectárea a 4.000, abriendo, eso sí, la posibilidad a los viticultores que consideren que tienen más producción de poder solicitar inspección con al menos quince días de antelación a la vendimia.
En el caso de los blancos, el rendimiento máximo autorizado sigue establecido en 9.000 kilos, aunque las estimaciones de Ilurce con sus tempranillos blancos se han visto reducidas a unos 3.000 kilos por hectárea en las parcelas más altas y a unos 5.000 en las de abajo del pueblo: «Es nuestro caso –detalla Víctor Escudero–, no todo el mundo tiene por qué estar en la misma situación, pero sí me da la impresión de que vamos a tener en general en toda la denominación de origen una cosecha muy escasa».
Pendientes del martes
En este sentido, los viticultores de Rioja Alta y Alavesa están pendientes de un nuevo pleno del Consejo Regulador, presumiblemente previsto para el próximo martes 19, en el que se aprobarán recortes de producción de forma generalizada en los municipios de dichas zonas.
El motivo no es otro que la escasa producción generalizada por una floración problemática con pocos racimos, por la altísima incidencia del pedrisco, con más de un tercio del viñedo productivo dañado y, sobre todo, por el feroz ataque de mildiu a los racimos.
¿Tienes una suscripción? Inicia sesión