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La vicepresidenta primera, Nadia Calviño, junto a la segunda, Yolanda Díaz. EFE
Calviño quiere que la banca refuerce el código para ayudar a hipotecados

Calviño quiere que la banca refuerce el código para ayudar a hipotecados

El Ministerio de Economía negocia con las entidades medidas para que las familias más impactadas por la subida del euríbor puedan asumir las nuevas cuotas de sus préstamos

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Miércoles, 21 de septiembre 2022, 14:26

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No habrá una limitación legal a los tipos de interés, como pide Unidas Podemos, el socio del Gobierno de coalición, que lleva insistiendo semanas en esta medida; tampoco parece que el Ejecutivo apruebe un fondo de contingencia millonario para ayudar a las familias que se vean afectadas por las subidas de tipos de interés, la propuesta estrella de sindicatos como UGT. En lo que trabaja Moncloa, de la mano del Ministerio de Economía, es en «reforzar» el código de buenas prácticas bancarias para tratar de ayudar a los hogares que peor lo puedan pasar en los próximos meses con el pago de sus hipotecas.

La vicepresidenta económica, Nadia Calviño, ha anunciado este martes en el Congreso que su departamento se está reuniendo con el sector financiero para ver cómo seguir profundizando y avanzando en el apoyo a aquellas familias que puedan tener una dificultad en el pago de la hipoteca. «Escucharemos todas las propuestas, atenderemos y analizaremos con mucho cuidado todas las ideas, porque estamos determinados a seguir apoyando a los ciudadanos de este país y afrontar de la mejor forma posible los retos que nos puedan venir de fuera», ha señalado.

De lo que se trata, según apuntan fuentes del sector, es de analizar las medidas incluidas en el código de buenas prácticas aprobado en 2012, cuando más arreciaba la anterior crisis financiera de la que se derivaron numerosos desahucios y situaciones de impago entre muchas familias.

Entre otras medidas, ese texto habilita la posibilidad de que la banca no cobre un interés de demora (el que se aplica por impago) superior al tipo ordinario más el 2% sobre el capital pendiente; acogerse a un plan de reestructuración de deuda para poder afrontar las cuotas, cos modificaciones que deben pasar, al menos, una carencia de capital durante cinco años, un tipo de interés de euríbor más 0,25 durante el tiempo de carencia y una ampliación del plazo de la hipoteca a 40 años. Además, la entidad puede reducir el importe de la deuda, aunque esta medida es a voluntad de la entidad.

Las entidades también están trabajando en sus propios planes de actuación, en un contexto en el que los tipos de interés ya se encuentran en el 1,25% y el euríbor ha escalado hasta el 2,4%, su cota más alta desde el año 2009. En cualquier caso, los bancos consideran que a día de hoy «no hay estrés hipotecario», al referirse a la situación por la que atraviesan las familias para abonar sus cuotas de los créditos. No prevén un repunte de la morosidad, al menos a corto plazo, ya que consideran que los tipos de interés que se aplican en las hipotecas españolas son aún bajos, mucho más si se comparan con los del resto de Europa.

Calviño también ha confirmado que estudiará también la propuesta planteada hoy por la presidenta de Ciudadanos, Inés Arrimadas, que pasa por aprobar una deducción fiscal temporal y extraordinaria para compensar al menos una parte de esta subida que están sufriendo las viviendas y las hipotecas de vivienda habitual.

La vicepresidenta ha recordado que en 2019 se cambió la Ley Hipotecaria para que aquellos que tienen una hipoteca tipo variable (más expuesta a la subida de tipos de interés) puedan cambiarla a tipo fijo gratuitamente si tienen una hipoteca de más de tres años, algo que ya ha hecho «un buen número de personas», según la vicepresidenta.

Sobre esto, la vicepresdienta ha explicado que los hogares con hipotecas a tipo variable se han beneficiado de la bajada de los tipos de interés durante estos años a diferencia de aquellos ciudadanos que desde el principio han tenido la hipoteca a tipo fijo. En 2021, más del 60% de los contratos hipotecarios se contrataron a tipo fijo y en lo que va de 2022, esa cifra asciende al 70%.

«Este Gobierno tiene que gobernar para todos para los ciudadanos que suscribieron una hipoteca tipo variable, pero también para aquellos que decidieron protegerse ante la normalización de los tipos de interés que se viene anunciando desde 2018», ha subrayado la vicepresidenta.

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