La SD Logroñés vuelve al play off

Lo cierto es que no pudo empezar mejor la tarde para los de Pouso, que a los siete minutos se adelantaban en el marcador. Rubio, que no entiende de medias tintas, peleó un balón por banda derecha y puso un centro al área para que Álvaro solo tuviera que empujarla. Nuevo gol del cántabro, que está de dulce.

A partir de ese momento la SD Logroñés cedió un poco de terreno y posesión a la Real Sociedad C, que pisó el área de Oriol en busca del gol del empate. Primero fue Adjabeng, de cabeza, el que lo intentó después de un despeje de Oriol. Álvaro, sobre la línea de gol, sacó la pelota.

Más tarde fue Gorosable el que lo intentó desde la frontal del área tras una buena asistencia por banda derecha, pero su disparo salió alto.

Pasada la media hora de partido Oriol estuvo muy atento para desbaratar un mano a mano con Soroeta, que se plantó solo ante el portero blanquirrojo tras una inteligente pared en el mismo área visitante.

A pesar de estas ocasiones, a la SD Logroñés se le veía tranquila sobre el césped de Zubieta, con la sensación de tener el partido controlado. Son las cosas que tiene el ser el mejor equipo visitante del grupo.

Pouso tuvo que cambiar a Albizua y dar entrada a Nacho Ruiz para ocupar la banda derecha. El de Arrigorriaga se marchó con molestias físicas, aunque también es cierto que estaba sufriendo por la banda derecha y tenía ya una tarjeta.

La segunda parte comenzó con la Real Sociedad C metiendo a la SD Logroñés en su campo y, en muchas ocasiones, en su área. Cierto es que con más corazón que peligro, pero un gol está en cualquier jugada y a los blanquirrojos no les convenía este escenario.

Los de Pouso se sacudieron la presión por mediación de Pau Miguélez. Primero en un disparo que él mismo se preparó y que salió rozando el poste derecho de la portería local. Y cinco minutos después, robando un balón en la salida de los donostiarras y obligando a Zango a realizar una gran intervención.

A punto de estar el empate en una buena llegada de Samuyiwa por la banda izquierda del ataque local. Pero cuando estaba solo ante Oriol hizo lo más difícil, disparar fuera.

A diez minutos del final, Rubio, incansable, entró en el área guipuzcoana por banda derecha, hizo el pase de la muerte y Lamadrid estuvo a punto de sentenciar el partido pero Zango metió una gran manopla. Y minutos después fue el propio Rubio el que disparó alto en otra llegada.

No hubo tiempo para más. Victoria de la SDL que regresa a puestos de 'play off'. El objetivo, ascender «pero en mayo o en junio».