Un 'San Francisco' de Zurbarán por el bicentenario del Prado
San Francisco ha dejado temporalmente la compañía de san Pedro Nolasco en la sala que comparten en el Museo del Prado y cuelga ya en la sala dedicada al Barroco en el Museo de La Rioja. La obra de Zurbarán será presentada al público logroñés el miércoles 27 y podrá verse aquí hasta el 24 de marzo.
Durante cuatro semanas el Museo de La Rioja se suma así a la celebración del bicentenario del Museo del Prado gracias al proyecto 'De gira por España'. Hasta el 19 de noviembre una docena de sus joyas viajan por el país: obras maestras de Rafael, Tiziano, Rubens, El Greco, Velázquez, Murillo o Goya. Y Zurbarán, que es el que ha recalado en Logroño.
«Estamos muy orgullosos de participar de este modo en la conmemoración del bicentenario del Prado y esperamos que el público riojano y todos los visitantes de la ciudad lo celebren con nosotros», comenta María Eugenia Santos González, directora del Museo de La Rioja.
Uno de los reclamos es obviamente este 'San Francisco en oración', obra tardía de Francisco de Zurbarán (1659) conocida como el 'san Francisco Hamlet' por el dramatismo de la calavera que el santo sujeta en su mano izquierda. «En este lienzo -afirma Gabrielle Finaldi, que fue subdirector del Prado-, Zurbarán llevó a lo más alto el refinamiento pictórico y cromático, y consiguió una de sus imágenes devocionales más intensamente conmovedoras».
Otro reclamo para los visitantes del Museo de La Rioja es precisamente la colección de pintura del siglo XIX y principios del XX cedida en depósito por el Prado. «Es una parte muy importante de nuestra exposición permanente -señala Santos González-, sobre todo las obras de denuncia social, porque reflejan el nacimiento de un arte nuevo al servicio de una sociedad nueva».
La mayor parte de las 28 piezas en depósito están al público. De las pocas que se guardan en el almacén ('Un almuerzo', 'Estudio de una cabeza' o 'Frutas') se propone recuperar y exponer 'Preparativos de fiesta' (1899), de Gabriel Palencia, por su relación con la temática costumbrista.
Cualquier intervención sobre los depósitos es supervisada por el Prado, que periódicamente se asegura de que sus obras se conservan debidamente. «El Museo de La Rioja cumple todas las garantías -afirma su directora- y es hoy uno de los mejores sitios para el Prado disperso».
