El carril ciclopeatonal de Lardero inicia su obra por el puente
La infraestructura, que permanece sin uso desde 1978, se incorporará a la vía de 1,8 kilómetros que comunicará con Logroño
Días atrás comenzaron las obras de reacondicionamiento del puente sobre la AP-68, que desde la inauguración de la infraestructura, en 1978, permanece sin uso. ... El objetivo es incorporar el puente al recorrido del carril ciclopeatonal que unirá Lardero con Logroño. A finales del año pasado el Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana (Mitma) adjudicó el contrato a la unión temporal de empresas formada por Acciona y Aquaterra por 387.319,33 euros (IVA incluido), habiendo sido la única oferta presentada en una licitación cuya base fue de 388.484,79 euros. El plazo de ejecución de la intervención son seis meses.
Esta infraestructura formará parte de los 1,8 kilómetros de recorrido que tendrá la nueva vía ciclopeatonal recientemente adjudicada por el Gobierno de La Rioja a la empresa Becsa por 1.028.982,40 euros, cuando la base de licitación era de 1.211.034,43, y un plazo de ejecución de ocho meses. El puente, en concreto, unirá la calle Enrique Granados con la avenida de Juan Carlos I, llegando la vía hasta la calle Sequoias de Logroño, atravesando la avenida de la Sierra. «Además del carril ciclopeatonal, el proyecto incluirá, entre otras actuaciones, la colocación de sistemas de contención, la impermeabilización y pavimentación del paso, la mejora de los sistemas de drenaje y la instalación de señalización horizontal y vertical», detalla el Mitma.
El municipio de Lardero se encuentra dividido en dos partes situadas a ambos lados de la AP-68, por una parte el núcleo urbano e histórico y, por otro, los barrios Villa Patro, Entre Ríos y Señorío de Cameros. La autopista dificulta de forma considerable la comunicación entre el norte y el sur de la localidad, si bien existen varios puentes transitables, como el de la avenida de Madrid y los caminos Cordonero y Viejo.
«Este nuevo carril ciclopeatonal contribuirá a mejorar la comunicación de ambas zonas y reforzar el tejido social del municipio», subraya el Mitma. Solo el Camino Viejo de Lardero es, al menos en una parte, la del carril bici habilitado décadas atrás, de uso exclusivo ciclopeatonal, los otros dos son compartidos entre peatones, ciclistas y vehículos a motor. «Hasta ahora, los peatones y los ciclistas deben utilizar la misma vía que el tráfico rodado, por lo que esta intervención contribuirá a mejorar la seguridad vial», apunta el Mitma.
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