A la espera de ayudas y soluciones

Aires de desolación se respiran en los terrenos agrícolas que el Ebro ha invadido e inundado en Alfaro. Hasta 650 hectáreas han quedado anegadas bajo las aguas del río y ahora los agricultores buscan una solución a los problemas causados por las inundaciones y las ayudas que les permitan recuperarse de las pérdidas económicas.

De momento, las explicaciones del consejero de Agricultura, Ganadería y Medio Ambiente, Iñigo Nagore, no has servido para calmar el malestar de los alfareños. Aunque Nagore aseguró que "nunca se ha actuado con tanta diligencia como ahora", también reconocía que no se había podido actuar como hubieran querido, "ya que una parte de la rotura estaba en Navarra" y el Ejecutivo foral "optó por esperar a que actuase la CHE".

Sin embargo, algunos agricultores han explicado a TVR su sensación de que ni unos ni otros han actuado como debían. Así, Ana Martínez explicaba que no podía trabajar. "Tengo todo con agua y no sé cuándo se me va a secar. El generador está roto, el tractor no lo puedo sacar", contaba. Por eso, echaba en cara a los dos gobiernos regionales que no se centraran en lo importante en lugar de ponerse pegas. "Primero deberían haber arreglado los daños y luego ponerse de acuerdo", concluía. Tomás Martínez seguía un razonamiento similar sobre la necesidad de que hubieran buscado soluciones antes. "Somos riojanos, españoles y tributamos donde nos toca", contaba el contrariado agricultor.

La alcaldesa de Alfaro, Yolanda Preciado, destacaba que "la impotencia es total", y adelantaba que toda el área zona afectada por las inundaciones "debería ser declarada zona catastrófica".