San Bernabé saca a Logroño a la calle

San Bernabé bien vale unas fiestas. Unas fiestas en las que, tras dos años sin celebrarse por la pandemia de coronavirus, se ha dejado de pensar en los que se van centrándose en los que se quedan... y en los que vienen, que no son pocos. El patrón ha vuelto a sacar a la ciudad a la calle y este viernes, en vísperas del día grande, la imagen procesionando durante el traslado brindó la fotografía más esperada: la de la normalidad. 2022 pasará a ser recordado. Y mucho.

Logroño se ha reencontrado tras un 2020 y 2021 de suspensión dada la emergencia sanitaria para recuperar la tradición, esa que empieza cada junio pasando por el arco de boj al inicio de la calle Portales, como hizo San Bernabé en desfile –previo a la procesión del sábado– camino del Revellín... como han hecho ya o harán miles de logroñeses y visitantes en dirección a cualquiera de los escenarios festivos –con un Casco Antiguo lleno desde la tarde del miércoles–.

La parte histórica se une estos días a la más lúdica, identidad y modernidad se dan la mano, y la capital de La Rioja enfila un fin de semana 'hasta la bandera' pues, no en vano, la primavera ha servido para consolidar visitas y pernoctaciones, al alza desde el pasado verano. Ya el lunes será día de hacer balance.

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